Europol coordina un ciberataque contra 26.000 páginas web en las que se hacía propaganda del terrorismo yihadista
25 nov 2019 . Actualizado a las 18:15 h.Un ciberataque coordinado por Europol ha logrado deshacerse de más de 26.000 páginas con contenidos yihadistas de la organización terrorista Estado Islámico (EI), en un ataque que ha dejado, temporalmente, fuera de la red a este grupo que busca crear un «califato virtual» con sus seguidores.
Los más de 26.000 artículos de contenido yihadista identificados en varias plataformas, lo que incluye cuentas en redes sociales, enlaces y una gran cantidad de canales de comunicación del EI, fueron referidos a nueve proveedores de servicios en línea, como Google y Telegram, que participaron en la operación europea entre el 21 y 24 de noviembre, en busca de anular la presencia yihadista de la red.
«Agencia de noticias» yihadista
El principal logro de este operativo es el ataque cibernético contra Amaq, considerada la «agencia de noticias» de la organización yihadista, y que ha sido durante los últimos años el principal medio de propaganda de sus videos, comunicados y mensajes para atraer a nuevos terroristas, reivindicar ataques o alentar a la yihad.
No es el primer ciberataque que se logra llevar adelante contra los servidores de Amaq para interrumpir las actividades en internet de la organización terrorista. Ya lo logró la Fiscalía belga el año pasado, pero pronto las páginas y las cuentas volvieron a estar activas, «lo que fue una sorpresa y esta vez se intentó hacer mejor», añadió el portavoz de la Fiscalía federal belga, Eric van der Sypt, en una rueda de prensa en La Haya.
En esta ocasión se trata de «un fuerte golpe» para los extremistas porque su presencia en internet en estos momentos es prácticamente nula, el dominio «online» de Amaq incluso se encuentra a la venta de nuevo, y, en caso de querer recuperar su presencia en la red, «le llevará mucho tiempo y trabajo» al EI, añadió la Fiscalía belga.
En el operativo han participado 12 Estados miembros, entre ellos la Policía Federal belga y la Guardia Civil española, junto a las autoridades judiciales de ambos países, coordinados por la oficina europea judicial Eurojust y policial Europol, en una operación que ha comenzado hace ya dos años y que aún sigue en marcha, por lo que no toda la información ha trascendido, al estar bajo secreto de sumario.
Un detenido en Tenerife
Dentro de esta operación, la Guardia Civil detuvo en Tenerife a un hombre natural de Mauritania, de 26 años, por «consumir propaganda terrorista en la red» con el objetivo de radicalizar a su entorno, compartiendo por WhatsApp y Telegram videos realizados por productoras afines al EI, según confirmó a Efe Alberto Rodríguez Vázquez, del departamento Antiterrorista de la Guardia Civil.
El presunto yihadista, único detenido en esta operación, residía legalmente en España desde hacía 8 años, «trabajaba allí y vivía en una zona bastante turística de Tenerife, pero dedicaba la mayoría del tiempo que no estaba fuera de su domicilio al consumo de esta propaganda», subrayó Rodríguez Vázquez.
Extrema violencia
Las imágenes que compartía mostraban ejecuciones de extrema violencia, técnicas para la ejecución de ataques y asesinatos, y manuales detallados para la fabricación de artefactos explosivos. Aunque su papel está siendo aún investigado, las evidencias con las que cuenta la Guardia Civil «apuntan al adoctrinamiento de otros en su ciudad» y no se descartan más detenciones.
«El caso comenzó hace un par de años y este tipo de operaciones están llenas de retos legales, prácticos y logísticos. Nosotros nos tenemos que asegurar de que las evidencias reunidas son legales y admisibles ante los tribunales en casos criminales en los Estados miembros», explicó el director de Eurojust, Ladislav Hamran, sobre su papel en este operativo.
Por su parte, el director del Centro Europeo contra el Terrorismo, Manuel Navarrete, subrayó que se buscaba «reducir la propaganda que el EI hace a través de los canales de redes sociales, Google, Facebook y Telegram» y que se ha hecho «un gran esfuerzo para identificar a los propagandistas y reducir la propaganda en cooperación con la industria para evitar que eso llegue a una situación de radicalización».
Las redes son una herramienta importante para el EI, que «siempre ha buscado crear un califato virtual» para que su mensaje «violento y radical se mantenga», añadió Navarrete, quien aseguró que la presencia del EI en internet «está mucho peor de lo que estaba» cuando aún controlaba regiones del norte de Irak y Siria.