La ultraderechista AfD demanda a Merkel por abusar de su cargo

Patricia Baelo BERLÍN / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Merkel lamentó la decisión de Annegret Kramp-Karrenbauer y le pidió seguir como ministra de Defensa
Merkel lamentó la decisión de Annegret Kramp-Karrenbauer y le pidió seguir como ministra de Defensa HANNIBAL HANSCHKE | Reuters

La CDU y su aliada CSU piden a su presidenta que busque cuanto antes al nuevo candidato a la cancillería

12 feb 2020 . Actualizado a las 08:27 h.

Quién iba a imaginar hace cuatro años que alguien iba a interponer una demanda contra la intocable Angela Merkel. Desde entonces, la crisis migratoria sin precedentes ha traído a más de un millón de refugiados a Alemania, despertando miedos y recelo en parte de la ciudadanía, algo que ha aprovechado el partido de extrema derecha AfD, que quedó tercero en las generales del 2017 y que hoy tiene representación en todos los Parlamentos del país.

No es de extrañar que haya sido la nueva bestia negra del tablero político germano la que este martes presentaba una querella contra la canciller. AfD acusa a Merkel de haber abusado de su puesto, al criticar la elección del primer ministro liberal de la región de Turingia gracias al apoyo de la ultraderecha, sobre la que pesaba un cordón sanitario. Durante una visita oficial a Sudáfrica, la líder de la gran coalición calificó el proceso de «imperdonable», e instó a convocar nuevos comicios.

«Dado que Merkel ya no ocupa una función relevante dentro de la CDU y tampoco se encontraba de viaje en calidad de miembro de la CDU sino como jefa del Gobierno alemán, estamos ante un claro caso de abuso del cargo con vulneración de la igualdad de oportunidades de los partidos», subrayó el copresidente de AfD, Jörg Meuthen. «No es la primera vez que no respeta el derecho y la ley», dijo Tino Chrupalla, recién ascendido a la dirección colegiada de la formación. Esta maniobra ultra se produce un día después de que la líder de la CDU y delfina de Merkel, Annegret Kramp-Karrenbauer, se retirara de la carrera por la cancillería y renunciara además a la presidencia conservadora a raíz del escándalo generado por la denominada «elección de la vergüenza» en Turingia

Urgencia

Ahora el plan de la cúpula de la CDU es nombrar cuanto antes al nuevo potencial relevo de Merkel, con el fin de poderlo someter a votación en el congreso que el partido celebra cada año en diciembre. La cuestión debe resolverse «en un plazo rápido. No es momento para juegos, sino de tomar decisiones en pro de la estabilidad de Alemania», le exhortaba este martes a AKK el líder de la hermanada CSU bávara, Markus Söder, que figura en la lista de candidatos.

Se le suman el magnate Friedrich Merz, el ministro de Sanidad Jens Spahn, y el primer ministro de Renania del Norte-Westfalia, Armin Laschet, el único de todos ellos que encarna la línea centrista de la continuidad y no aboga por un giro radical a la derecha. La llamada Unión de Valores, el ala más conservadora de la CDU, culpa a Merkel de haber «socialdemocratizado» al partido e insiste en que el viraje es necesario para recuperar a los votantes que se han fugado a AfD.

Desde sus filas, cada vez más voces piden colaborar con la ultraderecha en ciertos estados federados. Sobre todo en el este del país, donde AfD se sitúa por encima del 20 %. Según una encuesta, el 48 % de los alemanes creen que en una década los ultras participarán en el Ejecutivo federal o en los regionales. Pero el SPD, socio de Merkel en el Gobierno, amenaza con romper la alianza si los conservadores se derechizan aún más y critica sus reparos hacia el partido de La Izquierda.