El castrismo exhibe músculo con una multitudinaria marcha en La Habana

laura bécquer LA HABANA / EFE

INTERNACIONAL

Ernesto Mastrascusa | EFE

Raúl Castro reapareció junto a Díaz-Canel seis días después de las protestas

18 jul 2021 . Actualizado a las 10:46 h.

El Gobierno cubano organizó este sábado una concentración masiva para sacar músculo como respuesta a las protestas en su contra protagonizadas de forma espontánea por miles de personas hace una semana en varias ciudades del país y en el peor momento de la pandemia.

Con banderas cubanas y del Movimiento 26 de Julio, fotografías del fallecido presidente Fidel Castro y de su hermano y sucesor Raúl, quien también asistió al acto, los concentrados -muchos agrupados según su pertenencia a distintos organismos y empresas estatales- corearon consignas a favor de la Revolución, que identifica al sistema político vigente desde 1959.

Los participantes, convocados desde la madrugada, llegaron en autobuses estatales a la zona del Vedado capitalino conocida como La Piragua, frente al emblemático Malecón y muy cerca de la embajada de EE.UU. en La Habana. Para llevar a cabo la concentración, las autoridades desviaron las principales calles del barrio del Vedado y paralizaron el transporte público y privado.

En otras provincias, como la oriental Santiago de Cuba, también se realizaron actos similares de reafirmación revolucionaria.

En La Habana, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, culpó a Estados Unidos de ser el principal instigador de las masivas protestas que demandaron libertades civiles, una cuestión negada por Washington. Díaz-Canel manifestó en su discurso que el Gobierno estadounidense usa las redes sociales y una «campaña de intoxicación mediática» para promover el «odio» entre cubanos, disturbios y un clima de inestabilidad, argumento que lleva repitiendo desde que comenzaron las protestas el domingo 11.

Días previos a las manifestaciones, un grupo de jóvenes independientes organizó una campaña virtual para recolectar donaciones y enviarlas a las regiones más golpeadas por la crisis sanitaria, como la provincia de Matanzas. Luego se sumaron a las manifestaciones en las calles. Lo hicieron, dijo el presidente ante los congregados -más de 100.000 según el Gobierno-, aprovechándose de «las difíciles condiciones provocadas por la pandemia y el recrudecimiento del bloqueo».

El domingo pasado, tras iniciarse las protestas, Díaz-Canel instó a sus partidarios a salir a las calles listos para el «combate». «La orden de combate está dada, a la calle los revolucionarios», dijo en una comparecencia televisiva especial ese día. Este sábado aseguró que sus palabras tuvieron una interpretación «malintencionada» para dar a entender que «se había convocado a una guerra civil».

Sin cifras oficiales de detenidos

Antes de comenzar el acto, varios agentes detuvieron y sacaron a un hombre a la fuerza por gritar «libertad» y «patria y vida», uno de los lemas de las protestas antigubernamentales.

El Gobierno ha negado que en las protestas hubiera represión policial, lo que contrasta con los vídeos, las declaraciones de testigos y lo observado por los periodistas que cubrieron los sucesos. Sigue sin ofrecer cifras sobre el número de detenidos, que organizaciones y activistas cifran en cientos, e incluso miles.