Uruguay examina la gestión de Lacalle

HÉCTOR ESTEPA BOGOTÁ, E. LA VOZ

INTERNACIONAL

RAUL MARTÍNEZ | Efe

Decide hoy si refrenda algunas de las leyes más polémicas del presidente

27 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Primera gran prueba de fuego electoral para Luis Lacalle Pou. El apoyo al presidente uruguayo va a ser puesto a prueba este domingo, cuando los ciudadanos del país sudamericano deciden en un plebiscito si refrendan algunas de sus leyes más polémicas. «Mi sensación, y me puedo equivocar, es que hay una mayoría silenciosa del país que quiere que las cosas se hagan y se cumpla un programa de gobierno, que no quiere volver atrás en algunos temas», dijo el mandatario el miércoles.

A examen son sometidos 135 de los 480 artículos de una Ley de Urgente Consideración que el mandatario introdujo a mediados del 2020, nada más llegar al Gobierno, y que incluye cuestiones en materia de seguridad, salud, derechos laborales, energía y educación. La Constitución uruguaya permite que el poder Ejecutivo envíe al Congreso ese tipo de proyectos de ley para su debate exprés en el hemiciclo.

La mayoría legisladora oficialista aprobó en junio del 2020 las medidas, que según Lacalle, iban a modificar «todo lo que haya que modificar del Estado», pero los sindicatos y la oposición, liderados por el Frente Amplio, que perdió las elecciones del 2019 después de 15 años de Gobierno, consiguieron más tarde reunir 750.000 firmas, equivalentes al 25% del electorado uruguayo, que permiten la celebración del plebiscito de hoy.

Los detractores de las medidas critican especialmente disposiciones como la flexibilización del uso de la fuerza policial, la ampliación de 2 a 4 horas en el plazo que tienen los agentes del orden para informar a la Fiscalía de una detención, la consideración de ilegítimos los piquetes en huelgas que afecten a la libre circulación de personas o bienes, la habilitación de desalojos exprés, y el aumento a 100.000 dólares en el límite de transacciones en efectivo, algo que, consideran, hará aumentar la corrupción.

Pero, más allá de las normas en juego, a nadie se le escapa que también está en juego la popularidad del Gobierno. Salvo algunas excepciones, el oficialismo en bloque apoya el «No» a derogar las medidas, y el Frente Amplio defiende el «Sí». Una derrota del Ejecutivo abriría probablemente una brecha en la coalición gubernamental, formada por varios partidos, que podrían iniciar luchas internas, mientras que fortalecería al Frente Amplio de cara a futuras citas electorales, tras el batacazo del 2019.

Empoderamiento del Gobierno

En cambio, una victoria oficialista supondría otro duro golpe para la izquierda, empoderando al Gobierno para hacer más reformas.La lucha será, probablemente, voto a voto. La última encuesta muestra que el 41% de los electores apoya el «No» defendido por el Gobierno y el 36% votará «Sí», pero hay todavía un 19% de indecisos que, a buen seguro, inclinarán la balanza a uno u otro lado.

La irrupción de Lacalle en la campaña, el pasado miércoles, fue criticada por el ex presidente izquierdista José Mujica como algo que no está «dentro de las tradiciones democráticas del país». También mostró su preocupación ante la posibilidad de que Uruguay se «argentinice». «Que desemboquemos en dos polos y donde para uno todo es blanco y para otro todo es negro. Hay síntomas de eso», expresó, durante un acto del «Sí», el antiguo jefe de un Frente Amplio que se juega mucho en la consulta.