Lisboa recorta los gastos en la Jornada Mundial de la Juventud tras las críticas

b. suárez OPORTO / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Miguel Conceição | EFE

El coste del altar principal pasará a ser de 2,9 millones en vez de 4,2

12 feb 2023 . Actualizado a las 00:40 h.

El alcalde de Lisboa, el conservador Carlos Moedas, rectificó el presupuesto público destinado a las Jornadas Mundiales de la Juventud. El coste del altar principal pasará a ser de 2,9 millones de euros, en vez de 4,2. El segundo palco costará 450.000 euros en vez de dos millones, y será pagado por la Iglesia. Además, en rueda de prensa, Moedas y sus funcionarios aseguraron que será reutilizable, una opinión que contrasta con la de los expertos.

La rectificación llegó solo dos días después de un encuentro con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que aseguró a Moedas que cualquier inversión era poca comparada con el retorno que se generaría. Hacía referencia al presupuesto recientemente publicado para organizar las JMJ en Lisboa, con unas cifras que incendiaron a la opinión pública y escandalizaron a la propia Iglesia. Entre los cerca de 81 millones de gasto previsto por organismos oficiales, este gran palco de más de cuatro millones de euros se erigía como símbolo del dispendio. Un plan que Moedas defendió a capa y espada, argumentando que ya se había hecho todo lo posible por contener el gasto.

La reducción del 30 % del presupuesto se debe a una disminución de las dimensiones del palco: de 9 a 4 metros de alto y de 2.000 a 1.200 personas de capacidad. Moedas también elogió a la concesionaria (nombrada sin concurso público), por no haber pedido compensaciones. Pero la opinión pública se pregunta si no sería posible reducir también en un 30 % los demás costes. Aunque se valora el gesto, no deja de ser visto como una medida cosmética. 

Malestar laboral

Paralelamente, tanto el pasado jueves en Oporto como ayer en Lisboa, distintas manifestaciones expresaron su malestar por la pérdida del sector adquisitivo. Consiguieron concentrar a los sindicatos que representan a los dos grandes sectores en huelga: maquinistas y profesores, a los que se unieron unos sanitarios que ya llevan muchos meses reclamando mejores condiciones laborales. Todos pelean por una subida de los salarios que haga frente a la elevada inflación. Si bien este reclamo fue la mecha para desatar las protestas, ahora se suman peticiones para dignificar sus profesiones y facilidades para adquirir puestos fijos.