Armenia, dispuesta a renunciar al enclave de Nagorno Karabaj

Ricard G. Samaranch ESTAMBUL / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El primer ministro armenio, Nikol Pashinián (derecha), junto al presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo azerí, Ilham Aliyev
El primer ministro armenio, Nikol Pashinián (derecha), junto al presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo azerí, Ilham Aliyev Mikhail Kl | EUROPAPRESS

El primer ministro del país reclama a cambio que Azerbaiyán libere la franja fronteriza que ocupa desde la última guerra

23 may 2023 . Actualizado a las 19:02 h.

El primer ministro armenio, Nikol Pashinián, rompió un tabú al mostrarse dispuesto a reconocer la soberanía de Azerbaiyán sobre el territorio de Nagorno Karabaj, de mayoría armenia, y que ha sido motivo de diversas guerras. La declaración llega después de que Armenia perdiera la última guerra en el 2020, lo que ha dejado a Nagorno Karabaj en una situación de extrema debilidad: sitiada y protegida tan solo por unos 2.000 soldados de interposición rusos.

«Armenia está dispuesta a reconocer la integridad territorial de los 86.600 kilómetros cuadrados de Azerbaiyán… incluido Nagorno Karabaj», declaró Pashinián en una rueda de prensa el lunes. Ahora bien, pidió reciprocidad a su adversario: «Y entendemos que Azerbaiyán está listo para reconocer la integridad territorial de los 29.800 kilómetros cuadrados de Armenia». Tras la última guerra, tropas azerbaiyanas ocuparon una franja de territorio armenio situado cerca de la frontera mutua, escenario desde entonces de varias escaramuzas por parte de militares de ambos Ejércitos.

Reacciones

La nueva posición de Pashinian ha generado ampollas tanto en Stepanakert, la capital del enclave, donde viven unos 100.000 armenios, como entre la oposición nacionalista en Armenia. A cambio de reconocer la soberanía de Azerbaiyán, el líder armenio exige «garantías internacionales» de que Bakú respetará los derechos de los habitantes del enclave ya que, de otra forma, existe el riesgo de que el Gobierno azerbaiyano continúe su política de «limpieza étnica» y «genocidio». Pashinián considera que el estatuto de los armenios de Nagorno Karabaj debe ser fruto de una negociación directa entre Bakú y Stepanakert.

Tanto la Unión Europea como Rusia están intentando mediar entre ambos países para poner fin a su conflicto, que en las últimas tres décadas ya se ha cobrado más de 30.000 vidas. De hecho, el pasado 14 de mayo Pashinián y el presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, se reunieron en Bruselas con mediadores europeos. Uno de los escollos de las negociaciones es que Aliyev se niega a otorgar cualquier tipo de régimen de autonomía al enclave armenio.