El rival de Erdogan también recaba apoyos entre los líderes ultranacionalistas

Ricard G. Samaranch ESTAMBUL / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El líder opositor turco, Kemal  Kiliçdaroglu, y el  líder del Partido de la Victoria, Ümit Ozdag llegaron a un acuerdo tras su reunión de este miércoles.
El líder opositor turco, Kemal Kiliçdaroglu, y el líder del Partido de la Victoria, Ümit Ozdag llegaron a un acuerdo tras su reunión de este miércoles. ALP EREN KAYA / CHP | REUTERS

El opositor  Kemal Kiliçdaroglu cierra un acuerdo con el líder el Partido de la Victoria y logra así dividir el voto de los ultranacionalistas en la segunda vuelta electoral del domingo.

24 may 2023 . Actualizado a las 20:56 h.

A falta de grandes mítines o debates televisados, la campaña a la segunda vuelta de las presidenciales en Turquía, que se celebra este domingo, se ha convertido en una batalla por los votos del electorado ultranacionalista. Dos días después de que el presidente Recep Tayyip Erdogan recibiera el respaldo del ultranacionalista Sinan Ogan —5 % de los votos—, este miércoles fue su adversario. Kemal Kiliçdaroglu, quien engrosó su coalición electoral con otro ultra.

Se trata de Ümit Ozdag, líder del Partido de la Victoria, el principal de la coalición ATA, formada por cuatro partidos y que fue la que patrocinó la candidatura de Ogan. Así pues, el voto ultranacionalista se dividirá en la segunda vuelta, pero no está claro en qué porcentaje para cada aspirante. Puesto que con un 49,5 % en la primera vuelta Erdogan se quedó muy cerca del 50 % que otorga la victoria, en teoría, le puede servir quedarse con una fracción de los votantes que se decantaron por Ogan.

«La cuestión más importante en Turquía es la existencia de 13 millones de demandantes de asilo y migrantes irregulares», declaró Ozdag, flanqueado por Kiliçdaroglu en la presentación de su acuerdo programático. Con sus declaraciones, Ozdag añadía una dosis extra de hostilidad en el debate público hacia los refugiados sirios, la principal comunidad extranjera en el país.

El líder ultra aún estiró la hipérbole del número de migrantes en el país hasta los 13 millones. En su campaña para seducir a la extrema derecha después de la primera vuelta, el candidato opositor habló de «10 millones de refugiados» a los que prometió devolver a sus país. La cifra real no llega a cuatro millones. En el programa conjunto, se establece un período máximo de un año para el retorno de esta categoría de extranjeros.

Además también se afirma que no habrá ninguna negociación para resolver el problema del terrorismo, un mensaje de mano dura hacia el nacionalismo kurdo. Este punto contrasta con la posición de Kiliçdaroglu en la primera vuelta, en la que llegó a un pacto tácito con el principal partido kurdo, el HDP, con la promesa de solucionar la cuestión kurda a través del diálogo. Es caso de victoria, deberá escoger definitivamente un aliado.