Conmoción en Francia por la muerte de un menor en una brutal paliza entre adolescentes

María Rego MADRID / COLPISA

INTERNACIONAL

| EFE.Agentes de la policía francesa, en el juzgado de Tarascon, donde se produjo el ataque
Agentes de la policía francesa, en el juzgado de Tarascon, donde se produjo el ataque GERARD JULIEN

Se investiga si este caso y el de una adolescente que estuvo en coma forman parte de la denominada «violencia desinhibida» o peleas extremas entre jóvenes

05 abr 2024 . Actualizado a las 20:51 h.

Francia se encuentra conmocionada por los casos de «ultraviolencia» entre adolescentes que salpican el país. Los últimos, esta misma semana, con apenas un par de días de diferencia, mandaban a dos menores al hospital. La primera, de 13 años, conseguía salir del coma. El segundo, de 15, moría este viernes en la cama del centro sanitario donde fue ingresado tras una brutal paliza de cuyas terribles lesiones no logró recuperarse. Ambos episodios, ya en investigación judicial, han puesto en alerta incluso al presidente, Emmanuel Macron, que calificó lo ocurrido de «violencia desinhibida». «Las escuelas deben seguir siendo un santuario», defendió.

Shamseddine fue agredido el pasado jueves muy cerca del colegio Les Sablons en Viry-Châtillon, a unos veinte kilómetros de París, cuando regresaba a casa después de clase de música. Eran «entre las 16.00 y las 16.30 horas», calcula la Fiscalía de Évry, y en el camino se topó con «varios individuos» cubiertos con pasamontañas que le propinaron una paliza mortal y huyeron del lugar. Un vecino encontró al chaval, de 15 años, sobre el asfalto en parada cardiorrespiratoria y con el cráneo destrozado. Le operaron de urgencia esa misma noche pero horas después fallecía.

Intento de homicidio

Jean-Marie Vilain, alcalde de Viry-Châtillon, denunció la «ultraviolencia» ejercida sobre Shamseddine, un adolescente «sociable» y sin «preocupaciones» aparentes, según sus amigos, y advirtió del peligro de que estos casos se conviertan «en algo habitual». Apenas 48 horas antes, el martes, otra menor había sido brutalmente agredida en Montpellier, en el sur de Francia. Tuvo que ser evacuada al hospital, donde ingresó con convulsiones y permaneció dos días en coma.

A Samara, de 13 años, la atacaron frente al colegio Arthur-Rimbaud otras tres chicas, de 14 y 15, que ya han sido detenidas y han confesado haber «golpeado» a la joven. El caso, según el fiscal de la ciudad, Fabrice Belargent, que podría abordar lo ocurrido como un intento de homicidio voluntario, «se inscribe en el contexto de un grupo de adolescentes que solían insultarse» a través de las redes sociales.

La madre de la víctima, Hassiba Radjoul, asegura que la chica sufría acoso escolar. «Samara se maquilla un poco. Y esta joven -en referencia a una de sus compañeras- lleva un velo. Mi hija viste al estilo europeo. Durante todo el día había insultos, la gente la llamaba kahba, que significa perra en árabe», relató a medios franceses. Macron se mostró claro: «No hay nada que justifique que una adolescente haya sido atacada de esta manera por varios jóvenes de su edad».