El último abrazo de tres amigos en Italia antes de morir arrastrados por la corriente
INTERNACIONAL
La crecida del río Natisone a su paso por la localidad de Premiaracco, fronteriza con Eslovenia en la Italia nororiental, se llevó por delante a Patrizia, Bianca y Cristian; todos menores de 25 años
11 jun 2024 . Actualizado a las 18:16 h.Las abundantes precipitaciones que a finales de mayo asolaron el norte de Italia dejan una increíble tragedia que tiene como protagonistas a los jóvenes rumanos Patrizia Cormos (20 años), Bianca Doros (23 años) y Cristian Molnar (25 años). Según detalla el canal italiano Rai News, el pasado 31 de mayo Patrizia había tenido un examen en la Academia de Bellas Artes en la que estudiaba. Una difícil prueba de modelado 3D. Su amiga Bianca estaba casualmente visitando a la familia en Italia junto a su novio Cristian, así que contactaron con ella para verse y acercarse en coche al cauce del río Natisone, que atraviesa la localidad de Premiaracco en la provincia de Udine. Está en el noreste italiano, en la región de Friuli-Venecia, ya muy próxima a la frontera con Eslovenia.
Sin embargo, lo que parecía un plácido paseo entre colegas para relajarse y descansar tras un examen, se convirtió en una inesperada lucha por la supervivencia. El río Natisone, conocido en la zona por su peligrosidad dado que el curso atraviesa desfiladeros muy traicioneros que provocan que la corriente aumente repentinamente, era una bomba de relojería a punto de explotar tras las copiosas lluvias de días anteriores y los jóvenes no fueron conscientes del peligro que corrían hasta el último momento.
Las autoridades locales señalan que el caudal pasó de 15 metros cúbicos por segundo a 250 en apenas unos minutos. Los tres jóvenes intentaron refugiarse en una pequeña isla a la espera de que llegaran los servicios de emergencia mientras la escena era grabada por los móviles de transeúntes que paseaban por un puente próximo.
No conocer la zona, pese a que Patrizia residía en la misma provincia, fue también determinante. En ese lugar existe la prohibición expresa de bañarse y hay varios carteles que advierten del riesgo de ahogamiento. Además el peligro por crecida repentina en el río existía era extremo. Había alerta amarilla por riesgo de inundaciones tras las lluvias torrenciales sucedidas en las últimas horas. Cuando los tres jóvenes bajaron al río el día era soleado y el cauce seguía su curso normal... hasta que de pronto se vieron totalmente rodeados de agua y decidieron entonces darse un abrazo en un agónico momento.
Poco antes de que fueran arrastrados por la corriente, un bombero especializado en rescates fluviales intentó acercarse a ellos atado a una cuerda. Como apunta Il Corriere della Sera, el operativo resultó fallido porque la fuerza del agua era ya de tal magnitud que no fue posible.
Desde una escalera telescópica el equipo de salvamento hizo un último intento cuando los jóvenes ya estaban a merced de la corriente intentando acercarles cuerdas, pero, de nuevo, resultó infructuoso.
Hace una semana, el pasado lunes día 3 de junio, eran encontrados los cuerpos sin vida de las dos jóvenes implicadas en este terrible suceso. Aún sigue la búsqueda de Cristian, desaparecido desde entonces.