El primer ministro de Eslovaquia vuelve al trabajo casi dos meses después de su intento de asesinato

La Voz MADRID / EUROPA PRESS

INTERNACIONAL

LUBOS BILACIC HANDOUT | EFE

Robert Fico reaparece en el puesto tras estar dos meses hospitalizado

09 jul 2024 . Actualizado a las 19:46 h.

El primer ministro de Eslovaquia, el nacionalista Robert Fico, se ha reincorporado este martes al trabajo, casi dos meses después del atentado que sufrió el pasado 15 de mayo y que le dejó gravemente herido.

«Queridos medios de comunicación, liberales progresistas y oposición, os pido disculpas por haber sobrevivido, pero estoy de vuelta», escribió Fico en su perfil en la red social Facebook, junto a una foto que lo muestra en su despacho.

Fico responsabilizó a la oposición liberal, a los medios independientes y a agentes extranjeros de su intento de asesinato, argumentado que han creado un ambiente de odio por animar las masivas protestas ciudadanas que se han producido contra el Gobierno de populistas de izquierdas y ultranacionalistas que preside desde el pasado octubre.

Fico, que caminaba ayudado de una muleta, evitó el martes a los periodistas a su llegada a la sede del Gobierno, donde presidió una reunión de su equipo, según informa el diario Sme. Este medio adelanta que el jefe del Gobierno dirigirá el miércoles una reunión del Consejo de Ministros.

Fico, de 59 años, fue tiroteado el 15 de mayo por un hombre de 71 años que, tras ser detenido, justificó su acción en que no le gustaban sus políticas. El primer ministro tuvo que ser operado de urgencias y tras varias semanas en cuidados intensivos salió del hospital a finales de mayo y volvió a aparecer en público por primera vez el pasado viernes.

Desde su retorno al poder tras ganar las elecciones en septiembre del año pasado, ha interrumpido la generosa ayuda militar que Eslovaquia prestaba a Ucrania para defenderse de la invasión rusa y también promueve una negociación de paz con Rusia.

Su Gobierno ha disuelto la Fiscalía Especial anticorrupción e impulsado una reforma radical del código penal, que la oposición interpreta como una amnistía para los oligarcas afines al poder, y ha desmantelado la radiotelevisión pública y la ha sustituido por otra entidad que estará sujeta a más control gubernamental.