La Justicia israelí paraliza la huelga con el descontento civil disparado
INTERNACIONAL
![Protesta multitudinaria en Tel Aviv para exigir al Gobierno el retorno de los rehenes israelíes.](https://img.lavdg.com/sc/VMKBTws3FFt9VhwZHh7JdOmv_Eo=/480x/2024/09/02/00121725293281800966491/Foto/efe_20240902_122350582.jpg)
La oposición y EE.UU. presionan a Netanyahu para acordar un alto el fuego
02 sep 2024 . Actualizado a las 21:52 h.Las manifestaciones y la huelga general en Israel volvieron a enfrentar al Gobierno con la oposición y la sociedad civil. Harta de un Ejecutivo al que ya llaman «Gobierno de la muerte» por su inacción para salvar a los compatriotas que llevan casi un año en Gaza, la ciudadanía tomó este lunes las calles para pedir un alto el fuego que facilite la liberación de los rehenes en manos de Hamás mientras el primer ministro, Benjamin Netanyahu, y sus socios la acusaban de «favorecer los intereses de Hamás».
Con multitud de negocios cerrados, el aeropuerto de Ben Gurion paralizado y los hospitales a medio gas, el parón general convocado por el sindicato Histadrut tuvo que ser cancelado a las 14.30 hora local en vez de a las 18.00 debido a que un tribunal de Bat Yam decretó que la movilización se convocó «con fines políticos y no laborales» y, por tanto, era «ilegal». Se desarrolló con más calma que las protestas de la madrugada del domingo, en las que participaron medio millón de personas de las cuales fueron arrestadas una treintena.
Con todo, las protestas sirvieron para dar continuidad a la refriega política israelí. Netanyahu afirmó que las protestas eran «una vergüenza». «Esto es decirle a Yahya Sinwar [líder de Hamás]: ustedes mataron a seis; aquí estamos, apoyándolos». Sus socios ultras no se quedaron atrás. El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, criticó que Arnon Bar David, jefe del Histadrut, «aprovechó el poder del sindicato para convocar una huelga salvaje e ilegal, mientras tomaba partido contra el Gobierno bajo el disfraz cínico de preocupación por los secuestrados y al servicio de los intereses de Sinwar». Además, aprovechó para advertir que dio orden al Tesoro israelí de no pagar los salarios a los trabajadores públicos que se sumaran a las protestas Lo mismo dijo el titular de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir: «Con Hamás solo hay que hablar a través de la mirilla del arma».
Un criterio bastante contrario al del líder de la oposición, Yair Lapid, que tras compartir calle con los manifestantes, pidió de nuevo una sesión parlamentaria para acordar el alto el fuego en Gaza a los diputados. «No jurasteis lealtad a Netanyahu, sino al Estado de Israel. Por el bien de las familias y de los soldados, debéis exigir un acuerdo y decir claramente que si no se cumple, no podréis seguir formando parte de la coalición» dijo en referencia a los ultranacionalistas y los ultraortodoxos del Shas.
La tregua llegará de una forma u otra a la mesa de negociación, ya que Estados Unidos ha elevado la presión sobre Netanyahu. Fuentes de la Administración Biden citadas por The Washington Post aseguran que, en las próximas semanas, el presidente presentará un plan de cese de las hostilidades a Israel y Hamás en forma de ultimátum. Será la última oportunidad para que los más de 90 rehenes que quedan en Gaza sean retornados.