Agua, comida, luz, herramientas, medicinas y documentos... así debería ser el kit de supervivencia para 72 horas que recomienda la UE
INTERNACIONAL

Bruselas recomienda a todos los hogares disponer de suministros para poder pasar con tranquilidad al menos tres días sin ayuda externa
27 mar 2025 . Actualizado a las 10:09 h.La UE ya ha instado a los hogares de toda Europa a tomar medidas para tener suministros en casa para sobrevivir sin ayuda externa hasta 72 horas en caso de cualquier emergencia. «Debemos prepararnos para incidentes y crisis intersectoriales a gran escala, incluida la posibilidad de agresión armada, que afecten a uno o más Estados miembros», dice el borrador del documento Preparedness Strategy (Estrategia de Preparación), ante la incertidumbre sobre el futuro de la alianza europea y la posibilidad de cualquier tipo de catástrofe climática o tecnológica.
Aunque Bruselas no ha especificado todavía cuáles son las provisiones necesarias, la comisaria europea de Preparación, Gestión de Crisis e Igualdad, Hadja Lahbib, ha publicado un vídeo en redes de tono ligero en el que explica que ella ya está «preparada para cualquier cosa» y cree que así es como debería ser a partir de ahora el modo de vida europeo. Agua, porque «es vida»; conservas, una radio de onda larga, documentos de identidad, cerillas o mecheros, dinero efectivo, «que en caso de crisis es el rey» o comida. «Todo lo necesario para cocinar unos espaguetis a la puttanesca», bromeó la representante europea.
Entre las recomendaciones de la comisaria, con cosas que lleva supuestamente en su bolso por si acaso, y varias guías europeas —en los países nórdicos, el Reino Unido e incluso alguna que otra en España— podemos establecer un compendio de las cosas que tendríamos que tener en nuestras casas en caso de que, por alguna razón, nos quedemos sin suministro eléctrico o de agua corriente.
Agua
«El agua es vida», destaca Hadja Lahbib. Y las guías recomiendan al menos unos tres litros de agua al día por persona, que se utilizarán tanto para beber como para cocinar. Por si acaso, y dado que puede haber un corte en el suministro por cualquier razón, recomiendan tener garrafas de agua mineral o del grifo almacenadas en un lugar oscuro y fresco. También recipientes vacíos para poder utilizar el agua con más comodidad.
Recomiendan también probar u oler una o dos veces al año para ver si está en buen estado, y en caso de notar algo extraño, habría que desecharla y cambiarla.
En el momento de tener que usarla, si tenemos alguna duda sobre su posible calidad, se recomienda hervirla justo hasta que llega al punto de ebullición. Y tras eso será apta para el consumo.
Además, aconsejan guardar en el congelador agua en pequeñas botellas —sin llenarlas del todo, ya que pueden reventar—. Se podrían utilizar eventualmente como bloques de hielo y, una vez derretidos, sirven también para su consumo.
Comida
Es necesario, para casos de necesidad, tener comida saciante, rica en energía y calorías, que se pueda almacenar de forma segura a temperatura ambiente y que sea fácil y rápida de cocinar, preferentemente que necesite poco o nada de gasto de electricidad o de agua. Es conveniente también tener una cocina portátil o cámping gas. «Todo lo necesario para cocionar unos espaguetis a la puttanesca», llegó a bromear la comisaria durante una rueda de prensa. Lo mejor es aprovechar las compras regulares en el supermercado para adquirir algunos productos de más para almacenar. Entre ellos están:
- Alimentos no perecederos, como granos, cereales, pasta, arroz, cuscús, leche en polvo, pan crujiente, sal o especias, guardadas preferentemente en envases herméticos para evitar que, ante la falta de supervisión, entren en ellos insectos.
- Alimentos enlatados o envasados, como salsa de tomate, de pesto, encurtidos, comidas preparadas, legumbres envasadas, latas de conservas,...
- Productos con alto contenido en proteína: pescado en conserva, lentejas, guisantes o queso.
- Productos con alto contenido en grasa: aceite de oliva, aceitunas, cremas de cacao o de cacahuete y frutos secos.
- Productos con alto aporte energético: mermeladas, chocolate, barras de proteína, galletas, cremas de cacao o de cacahuete o frutos deshidratados, las como uvas pasas.
- Bebidas: café, té, cacao en polvo, zumos o leche.
- Comida para bebés.
Higiene y medicinas
Es recomendable tener suficiente papel higiénico, toallitas húmedas, gel hidroalcohólico, guantes, bolsas de plástico o de basura, un cubo con tapa, pañales, compresas o tampones, y también arena, compost o serrín.
En caso de no estar disponible el suministro de agua, no se podrán utilizar con normalidad los inodoros, así que no quedará otra que desechar los excrementos en bolsas de plástico, y aconsejan echarles serrín o arena para inutilizar su mal olor.
Las autoridades también hablan de la necesidad de tener un kit de primeros auxilios, con analgésicos, antiinflamatorios, agua oxigenada, Betadine, tiritas, vendas, además de cualquier medicina de prescripción.
Calefacción y luz
En caso de que haya un corte en la electricidad en pleno invierno o en épocas de entretiempo, la temperatura del hogar se desplomará enseguida.
Las guías recomiendan tener siempre a mano y accesibles prendas calientes, preferentemente de lana, y calcetines, gorros o bufandas. También sábanas, mantas, nórdicos y sacos de dormir.
Además, es aconsejable tener siempre a disposición cerillas, velas, mecheros y encendedores, además de linternas o lámparas que funcionen con baterías o cargadores solares para poder afrontar la oscuridad. Por precaución, deberíamos tener extintores a mano.
Como fuentes de calor, lo mejor, en caso de tener una chimenea, es disponer de leña. Otras alternativas pueden ser los calentadores de bombona o de gas, pero en estos casos hay que tomar siempre las precauciones necesarias para que haya ventilación en el hogar. Es mejor tener una ventana semiabierta para hacer respirable el aire y apagar los aparatos al irse a dormir.
En casos en los que no tengamos ninguna forma de calefacción, es recomendable juntarse todos los habitantes de la casa en una habitación, tapar las ventanas con mantas y cubrir el suelo con alfombras o prendas cálidas.
Comunicación
En una situación extrema, las informaciones por parte de las autoridades competentes son cruciales. Por ello, es necesario en la medida de lo posible mantener algún canal de comunicación. También, por supuesto, para seguir en contacto con familiares y amigos.
Por ello, recomiendan tener siempre a mano una radio que funcione con pilas, baterías o paneles solares y suficientes pilas de recambio.
De cara a poder utilizar el teléfono, se recomienda tener al menos una batería portátil, un cargador de móvil para el coche, y números de teléfono importantes escritos en un papel.
Documentos y herramientas
Las autoridades recomiendan tener también a mano documentos básicos que permitan la identificación, como el pasaporte o el DNI —«envuelto en algo impermeable, indispensable para la lluviosa Bruselas», bromea la comisaria europea—, dinero en metálico y tarjetas de crédito. En una crisis, «el efectivo es el rey, y las tarjetas quizás son solo un trozo de plástico», indica en su vídeo. También es útil mapa en formato físico.
Además, hay varias herramientas que pueden ayudar en múltiples funciones. El más útil es la navaja multiusos —«mi gran amiga, 18 herramientas en solo un cuchillo. Imprescindible», destaca Lahbib—, pero también son destacables abrelatas, alicates, llaves inglesas, tijeras o la cinta americana.