El representante palestino ante la ONU rompe a llorar: «¿Cómo se puede tolerar este horror?»

J. Gómez Peña COLPISA

INTERNACIONAL

EUROPA PRESS

Riyad Mansour se derrumba en la sede de Naciones Unidas en Nueva York al recordar el sufrimiento de la población de Gaza

29 may 2025 . Actualizado a las 09:50 h.

La desesperación domina Gaza. Las imágenes de ciudades destruidas y de miles de personas haciendo cola para lograr algo de comida bajo las bombas de Israel rebotan en las pantallas de todo el mundo. Tel Aviv ha paralizado el reparto de ayuda humanitaria y ha creado sus propias vías de suministro con el apoyo de Estados Unidos para repartir alimentos sin contar con las oenegés y la ONU. En la sede de Naciones Unidas se ha escuchado este miércoles el lamento de los gazatíes.

«Las imágenes de madres abrazando cuerpos inmóviles acariciando sus cabellos, hablándoles, pidiéndoles disculpas... Es insoportable. ¿Cómo alguien puede tolerar este horror? Disculpe, señor presidente. Yo tengo hijos, sé lo que significan esos niños, lo que significan para sus familias... Tener que ver la situación de los palestinos, sin que tengamos corazón para hacer algo, esto es intolerable para cualquier ser humano normal», ha denunciado Riyad Mansour en el inicio de su intervención. Lo ha dicho entre lágrimas. «Las llamas y el hambre consumen a los niños palestinos y por eso estamos tan indignados. Los catorce millones en los territorios ocupados, en la diáspora, en los campos de refugiados, en lugares tan lejanos como California, en todas partes. Amamos a nuestros hijos, amamos a nuestro pueblo, no queremos verlos pasar por esta tragedia y por estos ataques salvajes de los que reivindican las virtudes de luchar contra los bárbaros», ha continuado el representante palestino, que se ha derrumbado ante los diplomáticos del resto de países del mundo en el Consejo de Seguridad.

«Son niños, ¡niños!»

La ONU no deja de criticar las trabas diarias que Israel le pone al ingreso de ayuda humanitaria en la Franja. No es la primera que Mansour expresa su indignación. También en enero se le vio visiblemente emocionado al enumerar la cifra de muertos causados por las acciones militares ordenadas por el Gobierno de Benjamín Netanyahu. «Desde que Israel rompió el alto al fuego en marzo más de 1.300 niños palestinos han sido asesinados y unos 4.000 han resultado heridos. Son niños, ¡niños!», recordó Mansour.

Israel, tal y como anunció su primer ministro, no se plantea un cese de la invasión. Los ataques continuarán hasta «la victoria total» sobre los «terroristas de Hamás».