Pancreatitis, cómo reconocer la enfermedad por la que repatriaron a Álex García desde Tailandia
ENFERMEDADES
La enfermedad requiere el ingreso en régimen de hospitalización para controlar los síntomas y limitar las probabilidades de que se produzcan complicaciones
23 abr 2024 . Actualizado a las 12:28 h.Un avión medicalizado repatrió este domingo al español Alexander García Galas, de 36 años, que llevaba más de un mes ingresado en estado crítico en un hospital de Bangkok por una pancreatitis necrotizante. El paciente ha sido trasladado al hospital vizcaíno de Cruces, el centro más cercano al aeropuerto de Bilbao, donde aterrizó el avión.
García ya había intentado regresar al país por otros medios en dos ocasiones. Según informa la familia, su problema de salud lleva varias semanas desarrollándose. Incluso desde antes de viajar a Tailandia con su esposa, hace más de un mes, el español ya había manifestado síntomas gastrointestinales, pero el médico le había dicho que se trataba, simplemente, de «gases». Una vez en el país asiático, la enfermedad se agudizó y el paciente acabó hospitalizado con un cuadro de pancreatitis necrotizante a un 30 % de origen biliar.
Tras un vuelo de 14 horas, García ha ingresado en el Servicio de Medicina Intensiva del Hospital de Cruces, donde continúa bajo tratamiento. Le espera una recuperación larga, pero, de momento, se encuentra estable, tal y como señaló en declaraciones a los medios el doctor José Luis Moreno, del Servicio de Medicina Intensiva del centro.
Qué es la pancreatitis
La pancreatitis es un cuadro médico que consiste en una inflamación del páncreas, la glándula que se encuentra detrás del estómago, interviene en la digestión y está encargada de regular los niveles de glucosa en la sangre. La pancreatitis puede provocar hinchazón del órgano, dolor y alteraciones en su funcionamiento. En determinados casos, una pancreatitis aguda puede mejorar por sí sola. Si es grave, requiere de tratamiento hospitalario y puede tener complicaciones potencialmente mortales.
En el caso de García, la enfermedad es necrotizante, lo que significa que parte del páncreas ha muerto debido a la lesión. Esto sucede cuando el páncreas segrega enzimas digestivas que lo dañan. Cuando el daño es grave, algunas partes del páncreas no reciben suficiente sangre y oxígeno para sobrevivir. En este tipo de casos, el tejido puede infectarse y poner en riesgo la vida del paciente.
Los síntomas de la pancreatitis aguda suelen incluir:
- Dolor en la parte superior del abdomen que puede irradiar hacia la espalda
- Sensibilidad al tocar el abdomen
- Fiebre
- Pulso acelerado
- Malestar estomacal
- Vómitos
Causas
La pancreatitis suele aparecer como consecuencia de un funcionamiento inadecuado del páncreas. El órgano produce dos sustancias principales: insulina para regular los niveles de glucosa en la sangre, y enzimas para la digestión de los alimentos. Estas últimas se encuentran almacenadas en el páncreas, desactivadas.
Cuando el páncreas envía las enzimas al intestino delgado, estas se activan y descomponen las proteínas. Pero, si las enzimas se activan antes de lo necesario, pueden comenzar a actuar como jugos digestivos dentro del páncreas, irritando el tejido y destruyendo células. Ante esto, el sistema inmunitario responde generando inflamación.
En nuestro entorno, la prevalencia de la pancreatitis aguda es de entre 100 y 400 casos al año por cada 100.000 habitantes, según detalla el doctor César Prieto Frías, especialista en aparato digestivo de la Clínica Universidad de Navarra. Más de la mitad de los casos se deben a la expulsión de piedras a través de la vía biliar, que proceden de la vesícula biliar o del conducto de la bilis. De estas pancreatitis provocadas por piedras de la vesícula, dos tercios de los casos ocurren en mujeres. La mayor frecuencia se da en edades comprendidas entre los 50 y 70 años.
Otra de las causas más frecuentes es el consumo de alcohol, que puede producir pancreatitis aguda dependiendo de la cantidad ingerida, de la cronicidad de la ingesta, de los hábitos nutricionales y de otros factores predisponentes del paciente. Tres de cada cuatro pacientes con pancreatitis aguda por alcohol son varones de entre 30 y 50 años de edad.
Algunos factores de riesgo que pueden desencadenar una pancreatitis son:
- Una obstrucción del conducto biliar causada por cálculos biliares
- El consumo excesivo de alcohol
- El hábito de fumar
- La obesidad
- La diabetes
- El uso de ciertos medicamentos
- Niveles altos de triglicéridos en la sangre
- Niveles altos de calcio en la sangre
- Cáncer de páncreas
- Lesiones por traumatismo o cirugía
- Antecedentes familiares de pancreatitis crónica
Ante los síntomas de una pancreatitis aguda, el médico debe evaluar el estado del abdomen, verificando si existe dolor o sensibilidad al tacto, como punto de partida para el diagnóstico. En segundo lugar, se realiza una analítica de sangre para comprobar los niveles de algunas enzimas que segrega el páncreas, como la amilasa y la lipasa. También pueden realizarse pruebas de imagen, como una ecografía o un TAC, que permiten observar cálculos en la vesícula biliar o inflamación en el páncreas.
Tratamiento
Si hay un diagnóstico de pancreatitis aguda, el protocolo indica que se debe ingresar al paciente en régimen de hospitalización, al menos durante las primeras horas, para controlar los síntomas y limitar las probabilidades de que haya complicaciones. Una vez que la persona se encuentra estable, se usan otros tratamientos para tratar las causas subyacentes. Si los conductos biliares están bloqueados, puede ser necesaria una intervención para desbloquearlos mediante una sonda.
Si los cálculos biliares son la causa de la pancreatitis, podría recomendarse una colecistectomía, que es un procedimiento quirúrgico para extirpar la vesícula biliar. También puede ser necesario un procedimiento con cámara endoscópica para drenar el líquido del páncreas y extraer el tejido afectado por la enfermedad.
El caso de Álex García
Tras su hospitalización en Tailandia, se intentó repatriar al paciente vasco en dos ocasiones. En primer lugar, a través del seguro médico que había contratado al realizar el viaje, un retorno a España que fue frustrado puesto que sus condiciones al momento de embarcar no eran adecuadas para el traslado. En esa ocasión, García estaba vomitando, por lo que no pudo abordar el vuelo.
Más adelante, su situación empeoró y llegó a sufrir una parada cardíaca que obligó a intubarlo. La familia pidió nuevamente el traslado al país, pero en esa instancia, el seguro médico se negó a realizarla.
Finalmente, para su repatriación y tratamiento en España, el Ministerio de Defensa ha facilitado el uso de un avión medicalizado, el A330 del Ejército del Aire y el Espacio. Una aeronave adaptada para el transporte de enfermos, con cinco médicos militares y cuatro enfermeros militares «absolutamente preparados» para realizar la maniobra, según afirmó la ministra de Defensa, Margarita Robles, en una rueda de prensa.