Gustavo Paseiro, fisioterapeuta: «Hoy sabemos que el dolor de espalda no tiene que vivir con nosotros, antes se sufría en silencio»

Uxía Rodríguez Diez
UXÍA RODRÍGUEZ LA VOZ DE LA SALUD

VIDA SALUDABLE

Gustavo Paseiro Ares, presidente del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España
Gustavo Paseiro Ares, presidente del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España

El presidente del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España reivindica que «la fisioterapia no debería ser un artículo de lujo»

08 sep 2023 . Actualizado a las 18:31 h.

¿Cuántas horas vas a pasar hoy sentado o en la misma postura? Seguro que más de las que tu cuerpo debería. «Es fundamental que cambiemos la postura cada cierto tiempo y, sobre todo, que movilicemos a nuestro cuerpo porque está preparado para estar en movimiento continuo», lo explica Gustavo Paseiro Ares (A Coruña, 1976), presidente del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España. Este 8 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Fisioterapia, una profesión cada vez más demandada por una sociedad sedentaria. 

El síntoma más habitual, en materia de molestias de espalda, se conoce como dolor mecánico y se manifiesta después de realizar ciertos movimientos o mantener equis postura. La patología varía en función de la localización: cervicalgia en lo referente al cuello o a la cervical; dorsalgia en cuanto a la dorsal o torácica y, lumbalgia, si afecta a la lumbar. 

—¿Cualquier persona, sea cual sea su estado de salud, debería de ser revisada por un fisioterapeuta?

—Sí, la verdad es que precisamente la prevención es un pilar fundamental dentro de nuestra profesión. Nosotros somos capaces de conseguir que la gente cuide su cuerpo de una manera que tenga lesiones o patologías con más dificultad y sean más lejanas en el tiempo. La respuesta es un sí rotundo. La prevención en fisioterapia ayuda a que alguien viva mejor y viva más años.

—¿Qué es lo que más se ve a día de hoy en la consulta de un fisioterapeuta?

—Los fisioterapeutas, sobre todo, vemos problemas osteomusculares, muchas lumbalgias, cervicalgias, dorsalgias, dolores de hombro, rodilla, artrosis... Por supuesto, cada vez hay más fisioterapeutas especializados en otros campos y que están trabajando con pacientes oncológicos, neurológicos o respiratorios, algo que fue importante durante el covid. 

¿Cada vez nos duele más la espalda?

—Realmente este tipo de dolores siempre han estado ahí. Lo que pasa es que la gente lo sufría más en silencio, pero a día de hoy ya nos hemos dado cuenta de que ese dolor de espalda no tiene que estar con nosotros. ¿Cuál es la mejor manera de evitarlo? Por supuesto que cada persona es un mundo y el tratamiento tiene que ser individualizado, pero la regla de oro está relacionada con la movilización, con el movimiento, tanto desde el punto de vista terapéutico como desde el punto de vista de la prevención y de evitar que aparezcan determinadas lesiones. 

—Muchas veces solo acudimos al fisioterapeuta cuando realmente tenemos una molestia, cuando ya no podemos más, ¿no existe esa cultura de la prevención?

—No, no existe. Estamos consiguiendo poco a poco que la gente que llega la primera vez con un problema, después vuelva al fisioterapeuta para prevenirlo. Es decir, somos curativos en un primer momento, pero a partir de ahí, lo que sí conseguimos es evitar que ese dolor vuelva con una frecuencia alta, intentamos retrasarlo lo máximo posible. Estamos trabajando con tarjeta de crédito, no trabajamos con tarjeta de débito. Voy haciendo cosas mal durante mucho tiempo y, en vez de llegar la factura al final de mes, nos llega después de 15, 20 o 25 años. Es ahí cuando tenemos que ponernos a pagarla.

—Hablábamos de que muchos acudimos al fisioterapeuta cuando no podemos más, muchas veces también es verdad que hay una barrera económica. Pero hay también una pequeña parte de la población que acude a una consulta de este tipo de manera más o menos regular, incluso sin molestias, ¿es bueno?

—La revisión en fisioterapia es algo interesante y, sobre todo, en determinados tipos de problemas. Los osteomusculares están dentro de ellos. Es cierto que en muchas ocasiones el fisioterapeuta es capaz de solucionarte el problema, pero lo que no vamos a solucionar es lo que lo ha ocasionado. Si tienes un problema porque estás manteniendo una postura durante ocho horas seguidas, yo, como fisioterapeuta, te podré quitar tu dolor, mejorar tu musculatura y tu sistema articular. Lo que no voy a conseguir es que esas ocho horas no estés en esa misma postura. Mucha gente lo que hace es acudir al fisioterapeuta para ir previniendo que el mal uso de su cuerpo le vuelva a provocar un problema.  

—Somos muchos los que pasamos esas ocho o nueve horas sentados y que no podemos evitarlo porque el trabajo es así. ¿Qué podemos hacer para que esto no se vuelva un problema?

 —Sería fundamental que cada hora nos dediquemos tres o cuatro minutos a levantarnos, a estirar la musculatura, a movilizarnos y volvernos a sentar. Es fundamental que cambiemos la postura cada cierto tiempo y, sobre todo, que movilicemos nuestro cuerpo porque no está preparado para estar ocho horas sentado. Nuestro cuerpo está preparado para estar en movimiento continuo. Por lo tanto, cuando no le podemos dar ese movimiento continuo, lo que tenemos que hacer es no malacostumbrarnos. El primer consejo sería que cada hora nos levantáramos, estiráramos un poco, hiciéramos una movilización articular y volviéramos otra vez al trabajo. Y después, que no mantengamos siempre la misma postura durante el resto del tiempo. Al final, mantener una postura específica es lo que nos va a hacer tener más problemas. 

 —¿Y qué pasa con la higiene postural?, ¿realmente es más importante el movimiento, cambiar de postura o cuidar la postura?

—La higiene postural es importante porque nos permite mantener una postura durante más tiempo con menos problemas, pero eso es partir de una base equivocada. No hay mejor postura que el movimiento. Si nosotros nos movemos cada cierto tiempo y mantenemos una higiene postural correcta, estaremos evitando en un futuro tener problemas.

—El intrusismo profesional cada vez es mayor, en general, también en su profesión. ¿Hasta qué punto es importante esa lucha contra el intrusismo?, ¿qué debemos tener en cuenta como población cuando buscamos o necesitamos un profesional de la fisioterapia?

—El intrusismo cada vez está más instaurado dentro de nuestra profesión. Cada vez hay más gente haciendo cursos de formación de un mes y abriendo centros de tratamiento en los que la seguridad es nula y los peligros muy altos. ¿Qué podemos hacer nosotros como población? Podemos asegurarnos de que la persona a la que estamos yendo a recibir un tratamiento tenga la formación suficiente y las competencias suficientes, ¿Cómo? Hasta ahora lo único que podíamos hacer era buscar que ese centro tuviera un registro sanitario; si es un intruso no lo va a tener, y buscar que esa persona tuviera una formación específica. Ahora vamos a intentar que la población nos identifique fácilmente, porque hemos creado una imagen, que es la cruz blanca y fucsia de la fisioterapia. De este modo, cuando tú veas esa imagen de un centro en la calle, verás que ahí hay un centro de fisioterapia y tendrás la seguridad de que lo que vas a recibir ahí es un tratamiento adecuado.  

—Todos hacemos en algún momento de «fisioterapeutas de barrio», que si ponte frío, ponte calor, deberías llevar una muñequera... ¿Qué remedios caseros, entre comillas, sí que funcionan en su campo?

—El problema no es que el remedio funcione o no, el problema es que funcione en determinadas situaciones y personas. La solución de un dolor de tobillo en dos personas distintas es totalmente diferente. Por lo tanto, el tratamiento también es totalmente diferente. Tenemos que tener cuidado porque, a veces, esa ayuda se puede convertir en un problema, porque por ejemplo, en una inflación determinada, si le pones calor, lo que vas a hacer es que aumente la inflamación.  

—¿Qué es exactamente el ejercicio terapéutico y cuándo se debería de prescribir?

—El ejercicio no deja de ser una expresión de movimiento, controlado y específico. Se puede utilizar en muchos ámbitos, también para solucionar la patología de una persona. ¿Cómo se diferencia del resto? Pues simplemente con cuál es el objetivo, si se tiene como objetivo que deje de doler la espalda, o prevenir que la espalda vuelva a doler, es un objetivo terapéutico y eso tiene que ser implementado y tiene que ser prescrito y realizado por un profesional sanitario. 

—Cada vez hay más especialización dentro de la fisioterapia, ¿cuáles son los campos emergentes más demandados?

—Clásicamente se nos ha encasillado en ese ámbito muscular y en el ámbito neurológico. Con los años, la fisioterapia ha ido avanzado y a día de hoy no hay especialidad médica que no tenga a su lado un especialista de fisioterapia. ¿Cuáles son las más demandadas últimamente? Sobre todo, uroginecología, oncología, pediatría, que es una especialidad que cada vez está más en boga. Y, como decía, la oncología es un campo que ha evolucionado mucho en los últimos años dentro de la fisioterapia. Lo que queremos es que la gente que ha sobrevivido a su tumor viva lo mejor posible, y ahí es donde entramos nosotros con mucha fuerza.

—Es cierto que cada vez vivimos más, la esperanza de vida seguirá aumentando claramente y la fisioterapia tendrá un papel muy relevante en esto.

—Hay dos cosas que son fundamentales. Lo primero es conseguir que nuestra edad de envejecimiento, el momento en el que padecemos una patología, sea lo más tarde posible. Según los estudios, en el año 2035, vamos a ser el país con mayor esperanza de vida del mundo. Sin embargo, nuestro momento estadístico de sufrir una patología son los 57 años, más o menos. ¿Qué quiere decir esto? Desde esos 57 hasta los 84 u 85 que tenemos de esperanza de vida, estamos enfermos. El primer objetivo es que esos 57 se conviertan en 63, y que esos seis años los vivamos con una calidad de vida perfecta. El segundo objetivo es que desde esos 63 hasta que llegue el final de nuestra vida seamos autónomos. 

—Como fisioterapeuta, ¿qué cree que hacemos peor la mayoría de la población en nuestro día a día?

 —El sedentarismo. Cuando empezamos a trabajar se nos olvida todo lo demás. El cansancio que nos provoca el estar tanto tiempo sentados hace que no seamos capaces de realizar ningún otro tipo de actividad. El problema es ese sedentarismo desde los 21 o 22 años, hasta los 57 que enfermamos. Ese es el problema, no los últimos cuatro años. El problema es concienciar a nuestra población de que con 22 años tienes que empezar a cuidarte para cuando tengas 50.  

 —¿Cuáles son las principales reclamaciones como colectivo?

 —Hay dos principales. La primera es nuestra autonomía profesional, que la tenemos en el ámbito privado, pero no la tenemos en el ámbito público. Es decir, a día de hoy puedes ir a un fisioterapeuta pagando, pero no puedes ir a un fisioterapeuta porque tú quieras en el ámbito público. Tienes que pasar por un circuito en el que, cuando llegas al fisioterapeuta, llevas seis meses con esa patología. Queremos que, si te duelen las lumbares, pidas cita en tu fisioterapeuta del centro de salud.  

—Efectivamente, mucha gente no puede pagarse un fisioterapeuta.

—Evidentemente, la fisioterapia no debería ser un artículo de lujo. Tampoco lo es la cirugía, ni lo es un problema oncológico.

—¿Y la segunda reclamación?

—Es el tema de las especialidades. Necesitamos fisioterapeutas especializados en distintos ámbitos como en problemas uroginecológicos, en uci...

—¿También está la reivindicación de la prescripción de fármacos?

—Sí, realmente la gente entiende un poco mal esto. Nosotros queremos tener la competencia de poder prescribir determinados fármacos, con un objetivo fundamental, y es el poder ir retirando determinados fármacos de nuestros pacientes. Si tú estás en tratamiento médico para un problema de dolor que tengas en una estructura específica, ese tratamiento médico que vas a recibir va a ser mediante fármacos. Y va a ser una posología de una intensidad determinada en relación al dolor que tú tienes. Si yo, con procedimientos de fisioterapia, te voy reduciendo ese dolor, no tiene sentido que hasta dentro de tres semanas que tengas otra vez cita con el médico, estés tomando una sobredosificación de medicación. 

Uxía Rodríguez Diez
Uxía Rodríguez Diez
Uxía Rodríguez Diez

A Rúa, Ourense (1986). Coordinadora de La Voz de la Salud con una misión, que todos nos cuidemos más y mejor. La pandemia de covid-19 no solo la viví, también la conté en La Voz de Galicia. Mucho antes de todo esto trabajé en Vtelevisión durante casi una década como redactora, reportera y presentadora. Allí dirigí y presenté el programa Sana sana, sobre sanidad, bienestar y nutrición.

A Rúa, Ourense (1986). Coordinadora de La Voz de la Salud con una misión, que todos nos cuidemos más y mejor. La pandemia de covid-19 no solo la viví, también la conté en La Voz de Galicia. Mucho antes de todo esto trabajé en Vtelevisión durante casi una década como redactora, reportera y presentadora. Allí dirigí y presenté el programa Sana sana, sobre sanidad, bienestar y nutrición.