Se ubicará cerca del petroglifo de A Tapada do Monte, uno de los principales reclamos turísticos de la zona
29 jul 2017 . Actualizado a las 19:50 h.Sober tendrá este otoño un nuevo mirador en la confluencia del río Cabe con el Sil. Será el primero en toda la Ribeira Sacra que se instale en el Cañón del Cabe, concretamente, en A Pena do Conde, próxima a la Barca de Santo Estevo. «Desde Pena Castelo hasta este enclave hay diez balcones con vistas extraordinarias, pero también hay otros puntos que son miradores naturales. Yo considero que con diez miradores es una red aceptable», explica Luis Fernández Guitián, alcalde de Sober.
El proyecto, creado por Gimena Ingeniería, empresa que también se ha encargado de la renovación de otros miradores como el de Cadeiras o Santiorxo, abarca también la construcción de un aparcamiento y un camino de acceso para facilitar la llegada de los vehículos al lugar. «Elegimos a Gimena Ingeniería para seguir con la misma línea que en los otros balcones. A la gente le gustan mucho y los materiales que usan entonan muy bien con el paisaje», aclara Guitián.
Este enclave contará con un atractivo especial. Se ubicará cerca del petroglifo de A Tapada do Monte, uno de los principales reclamos turísticos de la zona. En Sober hay aproximadamente 50 petroglifos inventariados. «Los turistas buscan encontrarse con varios elementos a la vez», opina el alcalde, que considera que es importante poder ofrecer a los turistas un mirador que se encuentre a escasa distancia de un petroglifo.
La nueva infraestructura de la Ribeira Sacra cuenta con un presupuesto de 49.000 euros, de los que 39.000 son aportados por Turismo de Galicia a través de subvenciones para mejorar la accesibilidad a recursos turísticos. De los 10.000 restantes se hará cargo el Ayuntamiento de Sober.
Otros miradores
También con la llegada del otoño, pero cinco años atrás, se inauguró otro mirador en la parroquia soberina de Bolmente, esta vez a cargo de la arquitecta Isabel Aguirre. Este balcón, al igual que el que se construirá próximamente, se edificó pensando en la integración del paisaje y con el objetivo, por parte del Ayuntamiento de Sober, de convertirse en uno de los principales reclamos turísticos del municipio.