El escritor se describe a sí mismo como un lector empedernido y que no se recuerda sin un libro en la mano
24 ago 2023 . Actualizado a las 18:20 h.Francisco Narla (Lugo, 1978) es un escritor de novelas históricas y de misterio. Estos días está en Monforte por la Feira do Libro 2023, ya que es el pregonero. Empezó en el mundo de la literatura con su novela Los lobos del centeno (2009), ambientada en Galicia. Siguió desarrollando el género de novelas negras con títulos como Caja negra (2010) y más tarde continuó con la novela histórica. Dentro de este género literario tiene obras muy conocidas como Donde aúllan las colinas (2015), Laín. El bastardo (2018) o su última novela, Breo. El celta que desafió a Roma (2023).
—¿Cómo empezó su pasión por la lectura?
—Supongo que es una herencia. Mi padre era lector, en mi casa había muchos libros y desde niño fui un lector empedernido de todos los géneros posibles. Los cómics de Mortadelo y Filemón, Tintín y Astérix y Obélix ayudaron mucho cuando era pequeño. No me recuerdo sin un libro, la verdad.
—¿Y qué me dice de sus comienzos como escritor?
—Van aparejados. Creo que desde el momento en el que contar historias forma parte de tu vida como lector sientes que también sería importante aportar algo. Nos parece que escribir es lo mismo que contar historias, lo que es un tremendo error, pero cuando aprendes a escribir tienes la sensación de que puedes hacerlo también.
—Es el pregonero de la Feira do Libro de Monforte, ¿qué supone para los escritores como usted estos encuentros literarios?
—Es la única manera que tenemos de conocer a nuestros jefes. Una cosa terrible que tiene el trabajo como escritor es que pasamos dos o tres años escribiendo una novela y en todo ese tiempo no hablas con tus jefes, ya que yo puedo pagar las facturas gracias a que la gente compra libros. El momento de conocerlos es en las ferias y en las librerías, lo que nosotros hacemos no tiene sentido hasta que el lector transforma esas palabras en sentimientos. Poder hablar con ellos es lo que realmente le da sentido al trabajo de escritor.
—¿Es difícil vivir de la literatura?
—Tremendamente difícil, como de cualquier arte. Por desgracia el mundo del arte se ha convertido en algo en lo que es complejo tener un nivel de vida medio. Los mercados son muy competitivos, cada vez hay más obras y se hace más difícil. Cualquier arte es complicado, así que debes sentirme muy afortunado por lo poco que consigas.
—Háblenos de su nueva novela. ¿Qué se pueden encontrar los lectores en ella?
—Con su historia, con nuestra tierra, con la de nuestra patria. Nos hemos creído la versión de los vencedores pero aquí es donde más problemas tuvo Roma, nunca antes tuvieron que reunir a tantas legiones o levantar campamentos a tanta altura. La resistencia del Duero para arriba, incluyendo a Galicia, fue incomparable. Esta es su historia y es la única manera que podemos entender quiénes fuimos para saber lo qué somos y lo qué queremos ser. Lo único que pretendo con mi novela es darle un homenaje al pasado, que por algún motivo, hemos olvidado.
—¿A qué público pretende dirigirse con sus obras?
—Desde la adolescencia hasta las mayores edades. Si una historia es buena, debe serlo para todo el mundo. Al adolescente le llegará por unos motivos y a los mayores por otros.
—¿Cree que en un futuro lo digital acabará con los libros en papel?
—No. Esto es como cuando salió la televisión y la gente pensó que se acabaría la radio. Evidentemente el paradigma ha cambiado, las cosas también lo han hecho y no sabemos cómo se asentarán. Pero en Estados Unidos la narrativa en papel ha vuelto a subir igual que en los periódicos. Pero no lo sabemos, estamos en un proceso de cambio y atreverse a decir cualquier cosa es una tontería. Tendremos que esperar a ver cómo evoluciona.
—¿Qué lee en su tiempo libre? ¿Cuáles son sus géneros literarios favoritos?
—Leo absolutamente de todo. Incluso cosas que no me gustan o no me atraen en un principio, pero como escritor uno debe ser lector. Cualquier bestseller o cualquier cosa que triunfa la leo. Por ejemplo ahora estoy leyendo Los siete maridos de Evelyn Hugo y no es una novela que en principio me atraiga como lector, pero algo que lleva 15 ediciones es mi obligación como escritor estar al día y conocerlo. Hay que leer de todo.