Aqualia costeará una nueva tubería de agua hasta los depósitos de Monforte

MONFORTE DE LEMOS

La inversión será de 1,6 millones y la conducción irá del monte Cornado a San Vicente
13 jul 2022 . Actualizado a las 13:41 h.El alcalde de Monforte, José Tomé Roca, y el nuevo responsable de Aqualia en Galicia, Javier García Linares, firmaron esta mañana un preacuerdo por el que la empresa concesionaria de los servicios de agua y saneamiento en este municipio invertirá 1,6 millones de euros en instalar una nueva tubería general de fundición. El tramo que se renovará es el que discurre entre los depósitos del monte Cornado —a los que se bombea el agua desde la captación de la planta potabilizadora de la parroquia de Ribas Altas— y los que garantizan el abastecimiento desde San Vicente, ya en el casco urbano.
«Sen renunciar a nada, damos o primeiro paso para que se cumpran os compromisos pendentes entre Aqualia e o Concello de Monforte», declaró el alcalde en la rueda de prensa posterior a la firma. El preacuerdo será firme cuando reciba, en el pleno del próximo 26 de julio, el preceptivo visto bueno de la corporación. Solventado ese trámite —el equipo de gobierno tiene una amplia mayoría que garantiza su aprobación—, se dará a conocer el contenido del proyecto de ejecución redactado por una consultora local de arquitectura.
«O primeiro é que o aprobe [el preacuerdo con Aqualia] o pleno. Vaise aprobar pola composición da corporación, pero nos non poñemos nunca o carro diante dos bois», dijo Tomé. Aunque evitó dar por ahora una fecha de referencia para el comienzo de las obras, avanzó que estarán en marcha «antes do outono» y que «irán rápido». «Isto é para xa», subrayó.
La nueva tubería de fundición evitará episodios como el que se produjo en noviembre del 2017, cuando el casco urbano permaneció sin agua alrededor de sesenta horas por una rotura en la red. La avería se registró bajo el paso a nivel ferroviario de Rioseco, lo que dificultó enormemente los trabajos de reparación. La conducción que costeará Aqualia será independiente de la actual, construida en fibrocemento y más proclive por ello a las roturas. «E moi difícil —precisó el alcalde— que haxa roturas nunha tubaxe de función, pero se houbese algún problema sempre habería unha alternativa».
Las opciones en caso de avería serían tres en realidad, ya que cuando se produjo la rotura en Rioseco se habilitó un by-pass con la antigua conducción de Veiga, en A Pobra do Brollón. Con el acuerdo con Aqualia, indicó Tomé, «resolvemos un problema moi importante, porque Monforte xa non vai quedar sen auga potable en caso de problemas coa rede xeral».
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Lugo desestimó el febrero del 2022 un recurso de Aqualia contra el acuerdo del pleno por el que se le reclamó el pago de 2,2 millones pendientes de las inversiones que se había comprometido a realizar al firmar el contrato en el 2001. La sentencia, no obstante, reconocía un desembolso en obras por parte de la empresa de 734.000 euros, por lo que la deuda se cifraba en 1,6 millones.
Nuevo talante en la empresa
El alcalde precisó que el preacuerdo con Aqualia fue posible gracias al cambio que se produjo en enero de este año al frente de la delegación de Aqualia en Galicia. El nombramiento de Javier García Linares como director permitió, según destacó Tomé, «abrir unha nova etapa de diálogo». Por parte de la empresa, García Linares dijo que el conflicto con el Ayuntamiento de Monforte fue uno de los problemas «más graves» con los que se encontró al asumir el cargo. También señaló, por otro lado, que encontró en Tomé «el talante la predisposición ideal para resolverlo». «Ha sido muy fácil —añadió— llegar a un entendimiento [con el Ayuntamiento] y espero que siga durante muchos años».
Las conversaciones iniciadas a raíz de los cambios en la dirección de Aqualia en Galicia desembocaron en una propuesta municipal que fue remitida a la empresa el pasado 6 de enero y que dio pie a la firma del preacuerdo. «O obxectivo é normalizar a situación e que o investimento sexa útil para os veciños e o Concello», manifestó Tomé. Tanto el Ayuntamiento como Aqualia mantienen los recursos a la última sentencia. La empresa entiende que no debe abonar intereses de demora por la deuda y el Ayuntamiento no renuncia a los 734.000 euros que el juzgado de Lugo da por invertidos.