Los bomberos intentaban tapar anoche las numerosas goteras de la sede policial
15 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.«Desde hace más de 12 años no se ha organizado ningún curso específico para la Policía Local», asegura el CSIF. Además del déficit que ve en la actualización en la formación de los miembros del citado cuerpo, el sindicato dice que sus integrantes tienen que hacer frente a la carencia de medios y al deficiente mantenimiento de otros. Señala que a veces resulta difícil incluso encontrar una linterna que funcione.
CSIF denunció recientemente que el año pasado no recibieron ni las 25 balas del cupo anual, ni las correspondientes a los tres ejercicios de tiro que, por imposición legal, deberían haber efectuado y no hicieron. Señala que a nadie se le ocurre pensar que un cirujano no practique con el bisturí. El arma de fuego -indica- es una de las herramientas de trabajo de los policías y, por su seguridad y la de los demás, tiene que saber manejarla con destreza. Y para eso, concluye, es preciso practicar.
El déficit formativo va más allá de lo que afecta a las prácticas de tiro, según CSIF. Dice que hace unos doce años que los agentes locales de Lugo no tienen cursos de formación específicamente policial. Asegura que incluso en una ocasión hubo un curso de seguridad vial y los policías que lo solicitaron no fueron admitidos. Sostiene que también se dio el caso de que un agente que se había apuntado por su cuenta en un curso (no organizado por el Ayuntamiento pero de carácter oficial), no pudo asistir porque la jefatura no le dio permiso.
El sindicato comparte la opinión del alcalde en cuanto a la necesidad de formación; pero -aclara- Orozco al final «hace lo contrario de lo que predica» fuera de Lugo.
Por otra parte, los bomberos acudieron anoche a la sede de la Policía Local con el fin de intentar tapar las numerosas goteras, que estaban provocando que algunas estancias se llenasen de agua. El problema ya se detectó en la noche del viernes al sábado. Los agentes tuvieron que colocar varios cubos para recoger el agua que se filtraba desde el techo. La sede policial está en el edificio de la antigua prisión provincial, que se encuentra en obras para convertirla en un centro cultural.