El geriátrico de Castro de Rei, al fin en los últimos pasos de su construcción
LUGO
Balado anuncia que en próximos días se dará el alta de la conexión eléctrica y que luego la Xunta emitirá un informe
14 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El largo proceso seguido por la construcción del geriátrico de Castro de Rei parece llegar por fin a su conclusión: el último paso correspondiente a la preparación del edificio está próximo a su final. El alcalde, el popular Francisco Balado, anunció ayer que en próximos días se tramitaría el alta de la conexión eléctrica, lo que cerrará una fase que se ha llevado a cabo en los últimos meses.
El enganche de la luz a las instalaciones no implicará que el edificio esté ya completamente listo para poder prestar servicio. Balado reconoció ayer que todavía faltaría un informe de la Xunta, que se emitirá, dijo, tras una visita de técnicos de la administración autonómica. El regidor se mostró confiado en que tuviese lugar próximamente, si bien agregó que carecía de una fecha concreta.
Una vez efectuada esa visita, el informe podrá emitirse, lo que dictaminará definitivamente que las instalaciones cuentan con el visto bueno de la administración autonómica. De todos modos, la impresión del Concello, tal como apuntó Balado ayer, es que el edifico cumple con los requisitos necesarios para prestar esa función.
Aunque la tramitación de la conexión eléctrica corresponde al Concello, que también se ha encargado de la contratación de los trabajos necesarios para ese enganche, del funcionamiento del edificio no se encargará la administración local sino la asociación Mensajeros de la Paz, Tal aspecto se recoge en un convenio firmado por ambas partes hace años, y no será preciso rubricar ningún documento más para que esa medida tenga aplicación.
Centro de día
La residencia, contigua al edificio del CEIP Ramón Falcón, contará también con un centro de día, aunque los usuarios de ese servicio, tal como recalcó Balado ayer, serán vecinos del municipio y no usuarios del geriátrico. Está previsto que tenga ocho plazas y que se ponga a funcionar cuando la residencia ya esté en marcha.