La corporación provincial aprobó por unanimidad una moción del BNG para instar al Gobierno central a mantener todos los partidos judiciales de la provincia. El portavoz nacionalista, Mario Outeiro, criticó la centralización de servicios públicos: «De aprobarse a proposta de Gallardón, suporía un agravio para os concellos do rural lucense, posto que desaparecerían os partidos xudiciais de A Fonsagrada, Becerreá, Sarria, Chantada, Monforte, Mondoñedo, Vilalba e Viveiro, obrigando aos cidadáns a desprazarse a Lugo».
El diputado popular Francisco Balado explicó que la propuesta es para reorganizar, no para cerrar puestos, pero señaló que el PP apoya la moción porque «defendemos unha administración de xustiza eficaz e próxima aos cidadáns e non queremos que pechen xulgados no rural».