Tres policías de Lugo declaran por un presunto boicot a la operación Carioca

lugo / lA voz

LUGO

Los interrogatorios de la magistrada se centran en determinar si el que era comisario en Lugo, Maximino Losada, dio instrucciones para tratar de frenar la operación que tenía en marcha la jueza

16 jun 2013 . Actualizado a las 10:43 h.

Tres policías lucenses prestaron declaración ante la jueza Pilar de Lara en el marco de la investigación abierta para determinar si mandos de la comisaría lucense intentaron torpedear la operación Carioca. En esta fueron imputadas más de medio centenar de personas, entre ellas varios agentes del Cuerpo Nacional de Policía y Guardias Civiles por su presunta vinculación con una trama establecida en Lugo entre el responsable de varios burdeles y miembros de las fuerzas de seguridad del Estado.

Los interrogatorios de la magistrada se centran en determinar si el que era comisario en Lugo, Maximino Losada, dio instrucciones para tratar de frenar la operación que tenía en marcha la jueza y, sobre todo, para recabar el apoyo de los sindicatos para los policías que habían sido imputados. Asimismo trata de determinar si agentes que no prestaron atención a estas instrucciones o no las apoyaron fueron objeto de expedientes disciplinarios. A dos de los funcionarios les enviaron a sus domicilios agentes en sendos vehículos oficiales para comunicarles resoluciones. En ambos casos recorrieron más de 30 kilómetros. Además, los dos agentes enviados permanecieron dos horas apostados ante la casa del expedientado para poder comunicarle la decisión. Uno de los agentes declaró tener constancia de que el ahora excomisario había reclamado todo el apoyo sindical para que los policías imputados en la operación Carioca salieran indemnes. También explicó que le habían comentado en su momento que el exresponsable de la comisaría de Lugo dio orden para que funcionarios policiales acudieran a arropar de uniforme a los agentes detenidos.

Siempre en comisaría

A este mismo policía también le preguntó la jueza si sabía que policías imputados en la operación, aún estando suspendidos de empleo y sueldo, estaban «permanentemente y diariamente en la comisaría» accediendo a los ordenadores. El funcionario respondió que desconocía este extremo.

En el transcurso de la declaración prestada por un inspector, que negó las supuestas advertencias efectuadas por el excomisario, la magistrada le recordó que este había reconocido en su momento que se habló de la Carioca e incluso de que hubo una queja contra la jueza, aspectos que no figuraban en el acta. El agente le respondió que no recordaba nada de eso y que esas peticiones, o tuvieron lugar fuera del apartado de propuestas o, incluso, fuera de la propia reunión.