Solo una empresa está autorizada en Lugo para operar con drones

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

LUGO

CEDIDA

La actual normativa prohíbe usar RPA en bodas, partidos o conciertos

07 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Solamente una empresa de la provincia de Lugo figura en el registro de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, (AESA), lo que la acredita para trabajar con drones. Se trata de una constructora que incluyó como actividades a desarrollar levantamientos topográficos, fotogrametrías y vigilancia de incendios forestales, entre otras. En este registro no figura ningún otro operador de las más de 50 empresas que, según fuentes del sector, podrían estar realizando fotografías aéreas -bodas la mayoría de ellas- y otra media docena que se dedica a la fumigación con este tipo de aviones, los RPA. Estarían trabajando sin cumplir los requisitos establecidos en la normativa sobre este tipo de aparatos, publicada en el BOE de 17 de octubre del pasado año, sobre aeronaves pilotadas por control remoto, en vigor desde hace siete meses. En muchos casos, también realizando una actividad expresamente prohibida como bodas, partidos, manifestaciones o conciertos al aire libre.

La normativa de aplicación es estricta y exige para poder manejar drones el cumplimiento de una serie de requisitos que suponen contar con un certificado que acredita conocimientos teóricos y prácticos del piloto, lo que en el mundo de la automoción equivaldría al carne de conducir. De estos certificados el único centro autorizado en la provincia para impartir este tipo de cursos y es el Aeroclub de Lugo, que ya ha expedido medio millar.

Prohibiciones expresas

El certificado no es suficiente. La siguiente fase para trabajar con este tipo de aeronaves no tripuladas sería figurar en el registro de operadores, en el que, en la provincia de Lugo, solamente está inscrita la empresa de construcción. Para ello se requiere, entre otros requisitos, contar con una aeronave no tripulada, disponer de un piloto con la formación necesaria, que tiene que pasar unos controles médicos para obtener el correspondiente certificado y un seguro.

En la provincia el único centro acreditado como ATO para impartir los cursos para el manejo de drones es el Aeroclub. Luis Abelleira Álvarez, uno de los instructores insistió en que la normativa es clara respecto del ámbito de actuación de los drones. Prohíbe expresamente utilizarlos en ciudades o sobre aglomeraciones de personas al aire libre, como parques, playas con gente o campos de fútbol. Solamente se pueden usar en espacios cerrados y cubiertos, fuera de la jurisdicción de AESA.

Según Abelleira, la normativa es muy estricta también para los centros de formación acreditados, como el Aeroclub de Lugo, que tienen que cumplir una serie de estándares y estar aprobada a nivel europeo. Según el instructor, estas exigencias chocan frontalmente con la autorización oficial a los distribuidores para que puedan facilitar los certificados que acreditan conocimientos a quienes los compran.

«En Internet -dijo Abelleira- hay empresas que publicitan que regalan el certificado si se les compra la aeronave y otras lo ofrecen a cambio de 50 euros, a los que es necesario adjuntar de una grabación que demuestre que se sabe manejar el aparato.