El Hospital Veterinario Rof Codina de Lugo podría tener que pagar más de 500.000 euros en cotizaciones atrasadas a la Seguridad Social

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

LUGO

La Fachada del Hospital Veterinario Universitario Rof Codina de Lugo.
La Fachada del Hospital Veterinario Universitario Rof Codina de Lugo. ALBERTO LÓPEZ

La inspección de Trabajo podría afectar también a los contratos de los casi 50 becarios que pasaron por el complejo desde el año 2017

16 mar 2022 . Actualizado a las 18:00 h.

La inspección de Trabajo llevada a cabo en el Hospital Veterinario Rof Codina de Lugo siguen dejando un reguero de consecuencias una semana después de que trascendiese públicamente que la Seguridad Social (SS) había entrado de oficio. Después de que el ente transformase los contratos de 16 jóvenes becarios por considerarlos irregulares, varios afectados se quejaron por la cancelación de sus contratos tras haber obtenido una plaza de prácticas. Ahora, podría ser el turno de las consecuencias económicas a las que tendrá que hacer frente el Rof Codina.

Todas las partes implicadas (salvo el propio centro, que sigue sin dar declaraciones públicamente) están de acuerdo en que la Seguridad Social no se conformará con el cambio en los contratos de los empleados que, en la actualidad, continúan trabajando en el complejo hospitalario. La institución modificó varios de esos 16 contratos, que eran «de prácticas», y los convirtió en indefinidos ordinarios. Lo hizo sin consultar a nadie, de forma unilateral. Ahora, fuentes cercanas a la investigación dan por supuesto que la Seguridad Social le reclamará al Rof Codina de Lugo las cotizaciones reales correspondientes a los salarios de casi 50 becarios que pasaron por el complejo desde el año 2017.

Cuatro años, 50 empleados, más de medio millón de euros en cotizaciones

La solicitud de la Seguridad Social podría afectar severamente a las cuentas del Rof Codina. La empresa ingresa, anualmente, más de dos millones de euros, de los cuales casi el 50 % los obtiene a través de las subvenciones de entidades públicas. Según el sindicato lucense que está monitorizando el caso de los 16 contratos que la Seguridad Social señaló como irregulares, el Rof Codina podría tener que enfrentarse al pago de más de 550.000 euros.

La Seguridad Social transformó los contratos de varios de estos 16 trabajadores, que figuraban como becarios, y los hizo indefinidos. Esto se debe a que la institución entiende que estaban llevando a cabo funciones de un veterinario de carácter fijo en la empresa, no de uno de prácticas. Por ejemplo, realizaban atenciones médicas sin supervisión, algo que los becarios tienen prohibido por contrato. Al hacerlos indefinidos, se equipara su tipo contractual con sus funciones reales.

El sindicato, y otras instituciones que están siguiendo de cerca el caso, dan por supuesto que la SS llegará a la misma conclusión con respecto a los contratos de casi 50 becarios que pasaron por el Rof Codina en los últimos cuatro años, desde el 2017. Esto se debe a que el período de prescripción de un fraude de ley de este tipo serían esos cuatro años, por lo que no pueden entrar a valorar contratos anteriores a septiembre del 2017.

Extracto del burofax que el Rof Codina le envió a los empleados que habían obtenido una plaza, firmado por el director del hospital veterinario lucense.
Extracto del burofax que el Rof Codina le envió a los empleados que habían obtenido una plaza, firmado por el director del hospital veterinario lucense. ROF CODINA

En caso de que la SS entienda que esos contratos también eran irregulares, podría reclamarle al Rof Codina las cotizaciones reales que no habría abonado. Es decir, el complejo pagó a la Seguridad Social un porcentaje del salario bruto de esos contratos, de los cuales los empleados percibían 420 euros. Si la SS transforma esos contratos (como ya hizo con varios jóvenes que trabajan actualmente en el centro) en indefinidos, el salario bruto aumentaría hasta más de 1.500 euros. Esa diferencia, superior a los mil euros, provocaría que el Rof Codina le hubiera aportado a la SS mucho menos dinero en cotizaciones de lo que debería, ya que los jóvenes cotizaban como becarios y no como fijos.

Los cálculos disparan la cifra hasta los más de 500.000 euros. A cada uno de esos casi 50 empleados, habría que retirarles un 37% del salario bruto de cada mes, que iría a la Seguridad Social. Además, habría que sumarle un recargo del 20% a esa cifra, en concepto de recargo por el retraso acumulado. Si se tiene en cuenta que cada «falso becario» estuvo dos años en el Rof Codina, el cálculo arroja un resultado de cerca de 550.000 euros.

Según el sindicato que está gestionando la inspección de Trabajo y que conoce los detalles de la resolución de la Seguridad Social, solicitar las retribuciones de los contratos de los becarios de los últimos cuatro años es una práctica habitual en estos casos. Debe ser ratificada en un juzgado, eso sí, ya que el Rof Codina ya anunció en un burofax que le envió a varios afectados que recurrirían la resolución.

Lo que es mucho más complicado y que el sindicato descarta casi por completo es que esos casi 50 empleados puedan reclamar la diferencia en los salarios que deberían haber percibido. Ellos, cada mes, cobraban cerca de 420 euros, una cifra muy alejada de los más de 1.500 que cobrarán los actuales empleados del Rof Codina que se vieron afectados por el oficio de la Seguridad Social. El sindicato dice que es «casi imposible» que prosperase una demanda que reclamase la devolución del salario de forma retroactiva.

El Concello sigue el asunto «con mucha preocupación»

Ingresos del Hospital Veterinario Rof Codina de Lugo, procedentes del Concello, la Diputación o la USC.
Ingresos del Hospital Veterinario Rof Codina de Lugo, procedentes del Concello, la Diputación o la USC. XUNTA DE GALICIA

Previsión de las subvenciones de la Xunta al Hospital Veterinario Rof Codina el año pasado.
Previsión de las subvenciones de la Xunta al Hospital Veterinario Rof Codina el año pasado. XUNTA DE GALICIA

Varios días después de que trascendiese la inspección de Trabajo en el hospital y sus consecuencias, los miembros del Patronato de la Fundación Rof Codina empiezan a pronunciarse. El primero de ellos fue el Concello de Lugo, que afirmó que sigue la investigación «con mucha preocupación», ya que «hay gente joven que se está formando involucrada». Afirman que el Rof Codina no les ha dado explicaciones de manera formal, por el momento, y se mantienen a la espera de una convocatoria de la Junta del Patronato, donde esperan que la dirección de la Fundación y del hospital veterinario explique el asunto. «No les queda más remedio que darle explicaciones al Patronato», terminan desde el Ayuntamiento.

También se pronunció la Diputación de Lugo. Coincide con el Concello en que ambas instituciones aportaron 110.000 euros a la Fundación en forma de subvenciones el año pasado, y comparten también opinión, en el sentido de que prefieren no valorar el asunto hasta que el Rof Codina se explique en una Junta del Patronato. 

La última fue en el mes de enero, y se suelen convocar de forma semestral, pero todas las instituciones esperan que se convoque una reunión extraordinaria debido a la situación excepcional que está viviendo la institución.

La Xunta culpa a la Reforma Laboral y afirma que recurrirá la decisión de la Seguridad Social

De una forma casi opuesta se pronunció la Xunta. A través de la Consellería de Educación (la institución que más aporta al Rof Codina, más de 440.000 euros en el 2021), explicaron que «a Xunta leva un tempo advertindo das dificultades que trae consigo a Reforma Laboral no eido universitario». Culpan a esta modificación de la ley de la inspección de Trabajo y de sus consecuencias, y hacen hincapié en que «ata o momento, todas as inspeccións de Traballo realizadas na Rof Codina consideraron que o réxime de contratación como bolseiros era o axeitado».

Por eso, anunciaron que recurrirán la decisión de la Seguridad Social, y advierten de que «eliminar a categoría de bolseiro nesta institución é un perigo para a formación dos titulados en Veterinaria». 

Por el momento, la dirección del Rof Codina no se ha pronunciado públicamente, y todos los implicados esperan una Junta de Patronato extraordinaria para pedirle explicaciones a la gerencia y definir sus posturas al respecto.