Las ausencias penalizaron al cuadro lucense, que perdió ante un gran Unicaja
28 oct 2023 . Actualizado a las 21:03 h.No pudo ser. El Río Breogán no pudo dar la campanada en el Martín Carpena ante el Unicaja. Las importantes bajas con las que viajó a Málaga —solo fueron diez jugadores— pasaron factura a un cuadro lucense, que sin embargo si tuvo una buena puesta en escena. Los discípulos de Mrsic aguantaron mientras aguantaron físicamente, pero el hecho de contar con pocas rotaciones los penalizó.
La puesta en escena de los lucenses fue de matrícula. Dos triples de Momirov colocaron a los visitantes con un 0-6. Fue precisamente el tiro exterior el que lanzó al Río Breogán en el marcador, con un Momirov en estado de gracia, que en este primer juego anotó un total de nueve puntos.
Asimismo, ayudó a este buen primer cuarto la defensa en zona que propuso Mrsic, que provocó que los locales tuvieran problemas y se vieran sorprendidos por los jugadores lucenses. Esta entrega concluyó con un claro 15-22 a favor del Río Breogán.
Cambiaron las tornas en el segundo cuarto, entrega en la que el equipo de Mrsic encajó la friolera de 29 puntos, unos registros que permitieron al Unicaja darle la vuelta al marcador. En este juego, la fortaleza que tuvieron en los lanzamientos desde el perímetro no existió. Además, las pérdidas de balón permitieron a los malagueños correr, una virtud que aprovechan bien.
En esta entrega, el Unicaja controló tanto el rebote ofensivo como defensivo y además, el Río Breogán no estuvo intenso en el apartado defensivo. Esto se tradujo en una victoria en este parcial por parte del Unicaja por 29-11, lo que dejó el marcador al descanso en un 44-33.
A pesar de los problemas del Breogán, con las limitaciones en las rotaciones y el verse superado en varias facetas por el Unicaja, el equipo aguantó la embestida y se fue a los vestuarios con todo por decidir.
En el tercer cuarto, el Unicaja comenzó dominando en todas las facetas del juego. El hecho de contar con más rotaciones fue determinante para que la escuadra de Ibón Navarro mantuviera su ventaja. Pero cuando parecía que el Unicaja podía sentenciar el partido reaccionaron los lucenses. Y es que un parcial de 0-8 los mantuvo en el choque, dejando la resolución final para el último cuarto. Los lituanos Rudan y Sajus mantuvieron al equipo lucense en el partido.
El último cuarto fue igualado a las primeras de cambio, pero los locales a medida que fueron pasando los minutos incrementaron su ventaja, imponiendo un ritmo alto, al que no pudo contestar un Breo, que se vació, pero al que las bajas le pasaron factura.
Hay que destacar en esta entrega el pundonor y la entrega de Diouf. El jugador californiano sufrió un golpe al intentar luchar por un rebote, que se tradujo en la rotura de una de sus cejas. Ante el sangrado, el jugador se fue al banquillo, donde se le solucionó el problema. Y a pesar del dolor, el joven jugador de 22 años volvió a la pista y jugó con la misma intensidad que antes de sufrir el fuerte golpe.
Con el paso de los minutos, el Unicaja fue aumentando una ventaja, que se tradujo en el 87-70 final. A pesar de la derrota, el Río Breogán dio la talla y se mantuvo en el partido.
Recuperación de efectivos
Ahora, Mrsic tendrá una semana para preparar el partido en el Pazo ante el FC Barcelona. El técnico espera contar ya con Polite y con Sergi García, además del último fichaje, Justin Anderson. Eso sí, habrá que ver como llega físicamente.
Y ya con el equipo prácticamente al completo, el Breogán buscará reaccionar en el apartado de resultados para escalar puestos en la clasificación.