Un empresario de Sarria, condenado a dos años de cárcel por estafar 55.000 euros a 134 clientes con viajes que nunca contrataba

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

LUGO

El acusado trabajaba para una agencia de viajes sita en Sarria entre los años 2019 y 2020
El acusado trabajaba para una agencia de viajes sita en Sarria entre los años 2019 y 2020 A. SISO

El acusado vio reducida su pena al haber devuelto todo el dinero a los afectados

09 nov 2023 . Actualizado a las 13:51 h.

Un joven empresario de la localidad de Sarria, de 29 años, fue condenado este jueves a dos años de prisión por ser el autor de una estafa a gran escala perpetrada entre los años 2018 y 2020. Según quedó probado en el juicio, celebrado en la Audiencia Provincial de Lugo, el acusado se quedó con más de 55.000 euros de un total de 134 clientes que habían contratado viajes a distintas localidades y países a través de la agencia para la que él trabajaba. Sin embargo, el empresario nunca llegaba a adquirir esos servicios y se apropiaba de las cantidades que le entregaban sus clientes.

Antes de la celebración del juicio, la defensa del acusado llegó a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía y la acusación particular de una de las personas afectadas. Gracias a este pacto, su pena se vio rebajada a cambio de aceptar la autoría del delito que se le atribuía de apropiación indebida continuada.

En principio, la Fiscalía pedía tres años de prisión para él. La acusación particular, seis. Además de una multa de 2.880 euros en el primer caso y de 93.000 euros por daños y prejuicios en el caso de la acusación particular.

Finalmente, tras el acuerdo, el empresario fue condenado a dos años de prisión, al pago de una multa de 1.050 euros, y a indemnizar a esta víctima con un pago extra de 5.000 euros.

Las partes valoraron una atenuante muy cualificada de reparación del daño para acceder a esta rebaja de pena. Esto se debe a que el acusado devolvió el importe estafado a cada una de las víctimas antes de la celebración del juicio. En total, fueron unas 134 personas las afectadas de manera directa, cuya cantidad defraudada ascendía hasta los 55.215 euros, aproximadamente.

Así estafaba a sus clientes sin ser descubierto

El joven trabajaba, entre los años 2018 y 2020, para una agencia de Sarria, Viajes Barceló S. L., que, a su vez, trabajaba para B The Travel Brand, una marca superior, perteneciente al Grupo Ávoris.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, que el acusado dio por cierto al beneficiarse del acuerdo de conformidad, «desde el mes de febrero del 2019, aprovechando su posición laboral y movido por el ánimo de obtener un inmediato e ilícito beneficio patrimonial, el acusado comenzó a publicitar en sus perfiles personales en las redes sociales, así como directamente a conocidos de la localidad, ofertas de paquetes vacacionales a un precio inferior al de mercado, argumentando a estos que se trataba de "ofertas relámpago" en las que debían hacer inmediatamente el pago de todo o parte del viaje. Dicho pago podía llevarse a efecto por sus clientes bien directamente en efectivo o bien mediante ingreso en cuenta, facilitándoles a tal efecto las cuentas [...], ambas de su titularidad y sin relación alguna con la empresa B The Travel Brand, haciendo por tanto suyo el dinero aportado».

El Ministerio Público añade en su escrito que, una vez efectuado el pago, el acusado, «a fin de poder perpetuar su actividad ilícita», «no registraba los viajes en el sistema informático de la entidad B The Travel Brand, conminando a sus clientes a que se dirigiesen directamente a él para cualquier incidencia o asunto, eludiendo de este modo el conocimiento de los hechos por parte de su jefa».

Falsificaba las reservas

Cuando sus clientes le solicitaban algún tipo de documento que demostrase la existencia de la reserva del viaje, él «les hacía entrega de las reservas mediante documentos expedidos por el mismo y en los que figuraban los anagramas de las empresas comercializadoras de los paquetes de viaje, conteniendo asimismo números de localizadores y datos de viaje que no se correspondían con reservas efectivas en hoteles y compañías de vuelo». Es decir, justificantes falsificados.

«Finalmente, cuando muchos de los clientes se percataron de la situación en la que les había sumido la conducta del acusado y reclamaban a este la devolución del dinero previamente remitido, les exigía a cambio firmar un documento identificativo como “recibí” y en el que figuraba que renunciarían a ejercitar cualquier tipo de acción civil o penal contra él», afirma la fiscal en su escrito.

Usando este modus operandi, el ya condenado se benefició de las aportaciones de más de 130 clientes, que habían reservado desde viajes de luna de miel a vacaciones de estudiantes o escapadas de fin de semana. 

Ahora, la causa ha quedado vista para sentencia. El acuerdo se hará oficial cuando el tribunal de la Audiencia Provincial ordene la ejecución de este documento, siempre con la condición de que el condenado haga frente a las multas e indemnizaciones en tiempo y forma.