Una comisión decidirá el futuro de elementos relacionados con el régimen franquista
02 feb 2024 . Actualizado a las 22:05 h.El busto de Manuel Fraga en la alameda de su Vilalba natal seguirá por ahora en ese céntrico emplazamiento. Su futuro y el de otros elementos cuyo origen está relacionado con el régimen franquista (entre ellos, la Cidade Cultural de la capital chairega, que lleva el nombre del político) dependerán de una comisión que aún no está formada.
Así reaccionó la alcaldesa de Vilalba, Marta Rouco (PSOE) a una propuesta formulada por Tino Alvite, único edil del BNG en la corporación, en el pleno de este jueves. Aunque la moción se transformó en un ruego y no hubo, por tanto, posibilidad de votación, sí intervinieron representantes de varios grupos para expresar su postura.
Por un lado, el concejal del BNG aseguró que la única intención de su grupo era que se cumpliese la Ley de Memoria Democrática y que un contenido como el de su iniciativa respondía a una «cuestión de xustiza».
Por otro, José María García-Leira Boado (PP) recordó el papel de Fraga como ponente de la Constitución de 1978 y las mayorías, todas absolutas salvo la del 2005, obtenidas en las elecciones autonómicas gallegas a las que se presentó como candidato del PP. Para el edil popular, ese repetido respaldo ciudadano demuestra la vocación democrática de Fraga frente a la «teima» del BNG con su figura.
El busto se colocó en 1970, aunque sobre su construcción y la forma de financiarlo se produjeron intervenciones dispares. El representante del PP recordó que se había instalado con aportaciones vecinales y la alcaldesa le replicó que el Ayuntamiento había colaborado tras comprobarse que los fondos de vecinos deseosos de homenajear al vecino de conocida trayectoria pública no eran suficientes. El busto costó en 1970 250.000 pesetas.