Las piscinas apenas han estado unas semanas abiertas y con poca afluencia
23 ago 2025 . Actualizado a las 13:25 h.La Caldas de Lugo es un proyecto que desde que abrieron en la primavera del 2023 no ha parado de tener malas noticias. Si primero fue la falta de permiso de la Xunta, que le recordó al Concello que tienen que regir por el decreto estatal de piscinas, en el que consta que las piscinas exteriores, por motivos sanitarios, no pueden rebasar los 30 grados, meses más tarde tuvieron que cerrar por un episodio de legionela. Reabrieron el pasado mayo, pero desde julio están de nuevo cerradas por la entrada de esta bacteria, precisamente por la falta de usuarios de estas instalaciones.
Buena prueba de que están siendo un fracaso en cuanto a su uso es que las instalaciones de la Caldas de Lugo llevan un mes cerradas y nadie lo ha echado en falta. Los técnicos precisamente destacan que al no haber movimiento de usuarios, la legionela se asienta con más facilidad en las tuberías de las instalaciones. Además, el incremento de la temperatura del agua del Miño, de la que se nutre, también favorece que anide la bacteria.
Con esta situación, es muy probable que las Caldas sigan cerradas durante varias semanas. Entre que no hay movimiento de agua y tienen que pasar 15 días desde la última toma hasta que se vuelva a dar bien la analítica, supone un escenario en el que estas instalaciones junto al Miño estarán clausuradas buena parte de septiembre.
Hay que recordar que el Concello, tras resolver el problema de la legionela del pasado año, decidió acotar el uso de las instalaciones entre mayo y octubre, con lo que en dos meses volverán a estar cerradas, computando apenas unas semanas en funcionamiento y con pocos usuarios.