
La situación de las últimas semamas es la ampliación de un fenómeno presente en la comarca
13 oct 2018 . Actualizado a las 08:42 h.La suciedad del agua no solo preocupa en Guitiriz sino que ha pasado a convertirse en un asunto protagonista de plenos, como ocurrió anteanoche. El concejal del BNG, Xosé Lois González Souto, logró el apoyo del PP y de los otros dos ediles -Jesús Veres (Converxencia Galega) y Jordi Blengua (no adscrito)- a un conjunto de propuestas que incluyen la limpieza de los depósitos y del embalse y la exención de tasas a vecinos afectados por el problema.
Basándose en análisis del mes pasado, el pasado día 5 el Concello alertó de altos índices de hierro en el agua de la traída, procedente del pantano de San Juan, de donde se conduce a unos depósitos situados en el barrio de A Torre, en las afueras del casco urbano. El Concello achacaba a esos índices la suciedad del agua, aunque garantizaba la potabilidad. Desde entonces se han encargado nuevas pruebas.
ORIGEN
El hierro, presente en los cauces de agua que van a depósitos. Un pozo del que se abastezca una casa tiene una profundidad variable: por lo general, pueden oscilar entre tres y doce metros. Se abastece de aguas que son hilos de desigual caudal y que atraviesan varias capas geológicas del subsuelo. Al pasar por esas capas, el agua va disolviendo minerales.
En un embalse como el de San Juan (Guitiriz) la situación es la misma. El agua que almacena procede de pequeños arroyos de la zona que a su vez tienen su origen en fuentes y en manantiales. Las fuentes son aguas subterráneas que afloran en un determinado punto y que también contienen minerales.
frecuencia
Un mineral presente en la comarca. Al margen de los niveles que puedan variar, la presencia de hierro en aguas de la comarca chairega no puede sorprender, ya que la Terra Chá es una zona rica en óxidos de hierro que se sitúan a poca profundidad. De hecho, en Lousada (Xermade) hay unas antiguas minas de hierro.
CONSECUENCIAS
Un aspecto de tono ocre y varios contratiempos. El agua de Guitiriz sale estas semanas con un color marrón. Parece consecuencia de esos altos niveles de hierro. Aunque los análisis del Concello indicaban que el agua era potable, es un hecho que en la localidad han aumentado últimamente el consumo de agua mineral y los desplazamientos a fuentes del municipio. Por otro lado, los altos índices de hierro causan problemas a los electrodomésticos.
MEDIDaS
La limpieza de depósitos y embalses, conveniente. Si se aplican todas las medidas acordadas en el pleno de anteanoche, una de ellas, la limpieza del embalse, se llevará a cabo por primera vez tras haberse construido hace casi 40 años. Ese trabajo lo dejaría sin sedimentos ni partículas, aunque la alcaldesa, Regina Polín, mostró sus reservas sobre la posibIlidad de conseguir de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil y de la Xunta los permisos necesarios para ese trabajo. También la limpieza de los depósitos resultaría necesaria.
Los problemas de turbidez del agua de Guitiriz aparecieron ya otros años. Que se agraven en verano es efecto de unas reservas más bajas, en la que la concentración de hierro coincide con menor cantidad de agua en los depósitos. Este pasado verano, algunos días el consumo se disparó, rebasando el millón de litros.
Un problema también presente en Vilalba
En Vilalba, a cuyo casco urbano el agua llega del embalse de Pardasalvas (San Simón da Costa) y de la captación de As Cañotas (Lanzós), también se da a veces una situación similar. En este caso, en cambio, no se trata de niveles de hierro sino de arrastres de arcillas que suelen presentarse con algunas lluvias tras períodos sin precipitaciones. Hubo vecinos que ayer mostraron sus quejas por el aspecto del agusa de la traída, y Vilalba Aberta anunció que pediría responsabilidades al gobierno local y que lo instaría a exigir a la empresa concesionaria el cumplimiento de las cláusulas del contrato.