El BNG denuncia la adjudicación supuestamente fraudulenta de unas parcelas del Concello de Outeiro de Rei a una empresa del secretario municipal

La Voz LUGO

OUTEIRO DE REI

La parcela está ubicada en el polígono de Matela, en Outeiro de Rei.
La parcela está ubicada en el polígono de Matela, en Outeiro de Rei. Óscar Cela

El Ayuntamiento sigue cobrando 166 euros al mes del alquiler de los terrenos, de 12.000 metros cuadrados, utilizados por una empresa de energía solar que se fundó cinco días antes de que conseguir la concesión, en el año 2006

20 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace casi 17 años que una parcela del polígono de Matela, en el municipio lucense de Outeiro de Rei, vio cómo se instalaban los primeros paneles solares en un territorio que, por entonces, estaba en pleno crecimiento. Ahora, más de una década después, hay quien empieza a dudar de que la adjudicación de esos terrenos fuese todo lo justa que debiera. Y es que, hace apenas unos días, el BNG de Outeiro de Rei repartió entre los vecinos un dosier en el que sugiere que el alcalde, el popular José Pardo, y el por entonces secretario municipal, se pusieron de acuerdo para que el primero le diese la concesión de la parcela al segundo a precio de saldo y, presuntamente, sin las garantías legales pertinentes.

Son varias las supuestas pruebas que los nacionalistas adjuntan en estos documentos, enviados a los domicilios de todos los vecinos del municipio. En ellos, se remontan al año 2006, cuando una parcela de, según ellos, 12.000 metros cuadrados, fue concedida mediante designación municipal por un precio de 166 euros al mes. La adjudicación tiene un plazo de 35 años, en los que no habrá actualizaciones. «Mentres que a veciñanza se esforza para pagar os impostos, o alcalde dispón dos bens do Concello a prezo de saldo», dicen desde el BNG.

«Todo indica que se trata dunha empresa creada coa única intención de obter esta concesión»

El precio, sin embargo, no es la cuestión principal. Según el Bloque, la adjudicación se concedió al que, por entonces, era secretario municipal del Concello. En aquel momento, era el administrador único de la empresa LUSLIMPA S.L., como muestran los documentos de la época. Además, la compañía ni siquiera había sido dada de alta en el Registro Mercantil cuando salió a concurso la concesión.

Por ello, desde el BNG afirman que la compañía «creouse sete días antes de que se inicie o proceso da adxudicación», por lo que «todo indica que se trata dunha empresa creada coa única intención de obter esta concesión e captar subvencións públicas».

Desde el Bloque, añaden que «o Concello adxudicoulle o concurso á mesma persoa que tiña que verificar a legalidade do proceso». Cuentan, finalmente, que el administrador introdujo a su madre, a su padre y a su hermana como socios tras conseguir el contrato municipal, y que luego abandonó la empresa completamente.

Este proceso salió a la luz hace apenas unos meses, cuando el BNG preguntó al Concello sobre esta cesión tras analizar unos documentos sobre los ingresos municipales. Ahora, un colectivo del municipio ya ha transmitido al BNG su intención de llevar estos documentos a la Fiscalía e iniciar un proceso judicial contra el alcalde y el secretario municipal, pero esto está todavía en el aire.

El alcalde: «Nós non fixemos nada ilegal»

Desde el otro lado del proceso, el regidor y el funcionario defienden la adjudicación y niegan que haya ningún tipo de fraude. «Eu chamaríalle panfleto» espeta José Pardo, alcalde de Outeiro de Rei en aquel momento y aún hoy, al ser preguntado por el dosier del BNG. «A familia do secretario municipal presentouse a concurso e obtivo a concesión. Non se presentou ninguén máis. Non houbo ningún trato de favor. Ogallá puidéramos facer máis iniciativas coma esta, pero ninguén se volveu interesar por financiar un proxecto así, que revertiu 36.000 euros ao Concello desde entón», dice el regidor.

Al contrario que el BNG, el alcalde cree que «foi un bon negocio polo beneficio que sacamos» y que «só se presentou esa oferta». No considera que haya nada ilegal ni extraño en el proceso, ya que «a oferta era aberta e calquera se podía presentar». «A min que máis me da se a empresa tiña seis anos ou seis días?», comenta el alcalde, que insiste en que, «grazas a esa iniciativa, o Concello conseguiu un beneficio de 70.000 euros en 35 anos por unha finca que, se non se enchía, ía dar gastos de limpeza e nada máis»

Para Pardo, «non hai ningunha incompatibilidade nun proceso aberto para que se presente un empregado do Concello». «Nós non fixemos nada ilegal», concluye.

El secretario municipal: «El fundador de la empresa fui yo, pero presenté un escrito de abstención al presentarme a la adjudicación»

También tiene algo que decir J. M. V. P., el por entonces secretario municipal del Concello de Outeiro de Rei, que ahora ejerce en un municipio del área metropolitana coruñesa. Desde su punto de vista, la situación del polígono de Matela en aquellos años era de una necesidad acuciante de «promocionar energías renovables para rentabilizar todo ese terreno».

Según él, la concesión se otorgaba por una puja al alza. «Como no se presentó nadie, se constituyó LUSLIMPA en tiempo récord, para que no quedara vacante la adjudicación», reconoce. «Como fue el único postor, se llevó la adjudicación, no tiene más», concluye.

«El fundador de la empresa fui yo, pero presenté un escrito de abstención al presentarme a la adjudicación», especifica el funcionario, que afirma que se desentendió de la compañía en el propio año 2006 en beneficio de sus familiares.

El pasado mes de diciembre, poco después de que el BNG pidiese información en el Concello, la administración de la empresa cambió de manos. De su padre, pasó a su madre. «No sé nada de esto», cuenta J. M. V. P. 

Finalmente, el funcionario afirma que «no fue un gran negocio» para él y para su familia, ya que el canon para parcelas de ese tipo en suelo rústico es mayor, aunque incide que «quien sí hizo un buen negocio fue el Concello». 

Un «dano moral», según el BNG

El exsecretario municipal dice que su preocupación es «cero» y que «hace ya 17 años de este asunto». Sin embargo, el paso del tiempo no supone un escollo para rendir cuentas por este asunto, según fuentes del BNG, ya que «o Concello segue ingresando por esta concesión, o que significa que se podería investigar sen problema».

Desde el partido que ha denunciado este situación inciden, sin embargo, en el lado moral del proceso. «Nós temos nas nosas bases que non levamos estes asuntos á Fiscalía, senón que os denunciamos ante os veciños. Quen queira ir ao xulgado, que vaia», comentan. Desde la portavocía, inciden en que, «independentemente de que sexa legal ou non, amosa perfectamente unha forma de actuar do Concello nos últimos anos: usar o partimonio público para os seus intereses particulares», especifican.

A la espera de que esta denuncia acabe en el juzgado, el BNG informó a todos los vecinos de Outeiro de Rei por carta. Ahora, está por ver si el asunto va a más o se queda en una queja pública.