Algunos compradores de casa dijeron que la concejala intervino en operaciones de la urbanización Cimo da Agra
21 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Un parte de los propietarios de viviendas de la urbanización Cimo da Agra que están enfrentados judicialmente con la concejala sarriana Patricia Castro y su marido, Jorge Armesto López, prestaron declaración en la mañana de ayer ante la jueza de Sarria para explicar los motivos por los que denunciaron al matrimonio por una presunta estafa.
La declaración más contundente en lo que compete a la posible responsabilidad penal de la concejala fue la de uno de los denunciantes quien manifestó de manera rotunda ante las preguntas de los abogados que la facturación siempre la había tratado con Patricia Castro, a la que dijo que había entregado dinero en mano, al igual que a otra empleada de la empresa que construyó la vivienda. Esta persona ratificó que en primer lugar había abonado el importe del solar y luego el de las distintas fases de la obra. Dijo que lo habitual era que lo habitual era que hiciera los pagos antes de que se realizaran los trabajos que constaban en las certificaciones. Esta misma persona expresó, ante preguntas del abogado de los acusados, que las mujeres que le llamaban de la empresa encargada de las obras le dijeron en varias ocasiones que era Patricia Castro la que mandaba en la oficina y también la que gestionaba todo el papeleo.
Viviendas terminadas
Una gran parte de los declarantes especificaron que en los contratos que firmaron figuraba que les iban a entregar las viviendas completamente terminadas, con todos los permisos y servicios, cosa que aseguran que no sucedió.
El resto de personas que tienen viviendas en la urbanización y que figuran en la causa prestarán declaración en las próximas semanas.