«Indra lidera cinco proyectos en el sector de los sistemas no tripulados aéreos y navales y está cumpliendo con los objetivos de desarrollo y plazos marcados con la Xunta». Así lo explica Javier Barcala, director de vehículos aéreos de Indra. En Rozas, la compañía trabaja en el avión opcionalmente tripulado Targus, el dron marino, el Centro de Misión y Procesado de Datos, el denominado Smart Logistics 4.0 para el mantenimiento de vehículos e infraestructuras mediante el uso de sistemas no tripulados y un proyecto de realidad virtual y aumentada que permitirá generar entornos de simulación con ayuda de drones.
Aunque tiene equipos de trabajo distribuidos por toda Galicia, Indra coordina toda su actividad desde Rozas.
«A finales del 2018 alcanzamos uno de los hitos clave en el desarrollo del avión Targus: el inicio de las pruebas simuladas de vuelo. Se han comenzado a estudiar el comportamiento del sistema de control de vuelo, el de navegación y el de misión. Empleamos una avanzada metodología de ingeniería basada en simulación que hace ‘creer’ a los sistemas de la aeronave que se encuentran realmente en el aire», explica Barcala. «El siguiente paso, una vez que se completen las pruebas, será integrarlos en la aeronave de experimentación para abordar ya la campaña de experimentación en vuelo a lo largo de este año», aclara.
Indra trabaja de forma paralela en la integración del segmento de tierra, el encargado de operar el vehículo aéreo desde el suelo y controlar todos sus equipos de misión.
Por mar, Indra avanza con el dron marino USV-0, que ya ha superado las pruebas para validar las soluciones de diseño en rescate marítimo y vigilancia medioambiental. «En este momento se está terminando la fabricación del segundo prototipo, el USV-1, con mejores prestaciones de navegación y comunicaciones y sensores de mayor calidad. Su botadura está prevista para este mismo trimestre», explica Barcala.
El Centro de Misión y Procesado de Datos avanza también en Rozas. «El mayor desafío es el establecimiento de su modelo operacional, ya que requiere el empleo de avanzadas técnicas de comunicaciones, procesado, y fusión de datos procedentes de diversos sensores», explica el experto.
«Estamos cumpliendo con los objetivos y plazos marcados»