
Galicia, con la investigación en biotecnología como cabeza tractora, registró 24 operaciones y más de 180 millones de euros de inversión en el 2023
16 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Desde que se patenta un resultado de investigación hasta que llega al mercado, el camino es complicado y muchos proyectos no logran atravesar ese valle. La financiación es clave en estas primeras etapas y la financiación pública debe tener también una función de arrastre del capital privado para contribuir al éxito de los proyectos. Es una de las ideas claves que pone sobre la mesa Roberto Ranera, general partner de Beable Capital y uno de los participantes en la tercera edición del encuentro Invertir en ciencia sí es rentable que se celebra en Santiago los días 19 y 20 de febrero organizado por Unirisco y Nosocapital.
El contexto internacional y la situación geopolítica han marcado el año 2023 y el venture capital y private equity han optado por la prudencia, en la misma línea que los mercados internacionales, a la espera de que el entorno macroeconómico vuelva a favorecer la inversión. Con todo, y según datos del informe Spaincap, el año pasado el capital privado invirtió un volumen total de 6.709 millones de euros en un total de 844 inversiones, volviendo a niveles prepandemia En Galicia, el acumulado en cartera en el año 2023 ascendió a 896,7 millones de euros. En total, se produjeron 24 operaciones inversoras con un montante total de 180,8 millones de euros en la comunidad gallega, la mayoría (123,2 millones) en las etapas de expansión. El sector biotecnológico es el que más tracción tiene en la comunidad, junto a las tecnologías avanzadas y la inteligencia artificial, el foodtech y la transformación del sector primario.
«Nosotros solemos invertir entre 100 y 150.000 euros en las primeras rondas» en semilla y presemilla. Inmaculada Rodríguez, directora general de Unirisco, aclara que en rondas generales la inversión puede llegar al millón de euros y que para aquellas empresas que, por ejemplo, tienen que emprender ensayos clínicos —como el ámbito del desarrollo de nuevos fármacos— la inversión puede incrementarse hasta los cinco millones de euros. Por eso es necesario atraer capital de fuera de Galicia. «Se trata de unir el conocimiento y experiencia de diferentes fondos y también recursos económicos para poder dar continuidad. En este tipo de inversiones hay que poner dinero hasta que el proyecto coja autonomía», aclara.
Según el informe Spaincap, parece que los fondos internacionales mantienen su confianza en el tejido empresarial español, y en el large market cerraron 10 operaciones de más de 100 millones y fueron responsables del cuarto mejor registro histórico de la inversión en su segmento, con 5.042 millones de euros.
La clave es Europa. Lo explica Ranero: aunque sobresale en producción científica, le cuesta convertir esos descubrimientos en productos listos para el mercado. «Y esta fase de realización de valor es donde el ecosistema en Europa está fallando, porque hay mecanismos de financiación inadecuados». Estados Unidos cuenta con un «ecosistema muy robusto», tanto de venture capital como de capital privado, mientras que en Europa está todavía por llegar a esos niveles de desarrollo.
En las tecnologías profundas, los fondos que hay en Europa actualmente son «demasiado pequeños y con cierta aversión al riesgo», afirma el general partner de Beable, y es necesario «impulsar la inversión pública y privada y reforzar el mercado de capitales», generando un paraguas europeo. Para Inmaculada Rodríguez, además, generar incentivos fiscales sería una herramienta interesante para atraer la inversión privada al ámbito científico.