La comunidad puede ser un actor clave en el acceso a materias críticas
10 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La Comisión Europea ha anunciado la puesta en marcha del plan RESourceEU, destinado a garantizar el acceso a fuentes alternativas de materias primas críticas y reducir la dependencia de proveedores externos. Esta estrategia incluye la diversificación de suministros internacionales, el reciclaje y la recuperación de materiales dentro de Europa, y, muy especialmente, la investigación y exploración de nuevos yacimientos en el territorio comunitario.
La transición energética, el avance de la digitalización y la seguridad industrial europea dependen en gran medida del acceso a un grupo de elementos químicos conocidos como tierras raras. Estos minerales, imprescindibles para la producción de tecnologías críticas y estratégicas, han adquirido en los últimos años una gran relevancia geopolítica. Investigar la presencia y el potencial de las tierras raras en Galicia constituye una prioridad tanto para las instituciones como para el sector minero gallego.
Las tierras raras comprenden un conjunto de diecisiete elementos químicos, cuyo valor reside en sus excepcionales propiedades físico-químicas. Aunque no son escasas en la corteza terrestre, sí lo es su concentración en yacimientos económicamente rentables y su compleja extracción y procesamiento. Estos minerales son fundamentales para la fabricación de imanes permanentes, motores eléctricos, turbinas eólicas, baterías avanzadas, dispositivos electrónicos y equipamiento para sectores estratégicos como la defensa o la aeronáutica.
Actualmente, la Unión Europea importa más del 90 % de los imanes de tierras raras desde China. Esta dependencia expone a Europa a riesgos estratégicos y económicos, como ha recordado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al subrayar que «el acceso a materias primas críticas es una cuestión de seguridad nacional».
En este marco, la empresa gallega Áridos do Mendo destaca como ejemplo pionero. Además de su actividad extractiva tradicional mediante la explotación de un depósito aluvial del río Miño, obtiene otros minerales como oro y monacita — de la que luego se obtienen tierras raras— mediante técnicas físicas y sin uso de productos químicos. Esta labor la convierte en una de la única compañía a nivel nacional que ya trabaja con materiales vinculados a estos elementos, situando a Galicia en el mapa de la innovación minera europea.
Potencial y responsabilidad
Galicia posee un potencial aún por explorar en el ámbito de las tierras raras. La investigación geológica avanzada es esencial para determinar la existencia, calidad y viabilidad de estos recursos en la región. Este conocimiento permitirá evaluar con rigor las oportunidades industriales y las condiciones para una posible extracción compatible con los más altos estándares de sostenibilidad y protección ambiental.
La experiencia gallega en la gestión de minerales estratégicos como el wolframio o el cobre, así como su capacidad para desarrollar proyectos innovadores y sostenibles, sitúan a la región en una posición relevante para contribuir a la estrategia europea de materias primas críticas.
Por ello, promover la investigación sobre tierras raras en Galicia es una apuesta por el futuro de la comunidad y de Europa. Supone abrir nuevas oportunidades industriales, generar empleo cualificado y atraer inversión y talento. Además, refuerza la posición de la comunidad como actor clave en la autonomía estratégica europea, permitiendo que la transición energética y digital se sustente sobre recursos gestionados con rigor, responsabilidad y transparencia.
La colaboración entre administraciones, universidades, centros tecnológicos y empresas será decisiva para garantizar que cualquier avance se traduzca en beneficios reales para la sociedad gallega, respetando el entorno y los valores patrimoniales que nos definen. Es necesario avanzar con visión de futuro, compromiso con la sostenibilidad y voluntad de diálogo social.