Hoy tenemos malas noticias para los puristas de la gasolina, aquellos que denostaron a Porsche por lanzar modelos eléctricos en su día. Es cierto que la marca alemana es uno de los símbolos de la deportividad automovilística y que sus coches no tienen parangón en eficacia y prestaciones sobre el asfalto. Pero cuando llegó el Taycan, su primer deportivo eléctrico, en el 2019, muchos se sintieron traicionados, sin siquiera comprobar si aquel modelo les ofrecía las mismas sensaciones al volante que el resto de los Porsche, pese a no emitir gases ni sonar a multicilíndrico. Creo que las críticas fueron injustas, ya que el paso a la electrificación era obligado, por culpa de los ineptos políticos europeos.
Algunos se refugiaron en que la otra marca deportiva por excelencia, Ferrari, la esencia italiana, el «cavallino rampante», se mantenía fiel al sonido celestial de sus motores en V de gasolina.
Pero la electrificación del automóvil no tiene límites, ni siquiera los de las naves de Maranello, y hace una semana nos daban desde allí la confirmación de que Ferrari dispondrá, desde el próximo año, de un modelo eléctrico. Un nuevo mazazo de kilovatios para sus incondicionales «tifosi», que ya habían torcido el morro con la aparición de modelos híbridos enchufables con anterioridad.
La batalla de la electrificación está perdida para los amantes de la gasolina. Ya no hay remedio. Como dijo Julio César, antes de morir a manos de su hijo Bruto: «Tu quoque fili mi?» (¿Tú también, hijo mío?). Ahora podemos exclamar: ¿Tú también, Ferrari?
Y la respuesta es sí, Ferrari también. Pero antes de rasgarnos las vestiduras, como hicimos con Porsche sin probar las bondades de los Taycan o los Macan eléctricos, que van de maravilla, veamos lo que nos prepara Ferrari.
Será un modelo de cuatro plazas, con cuatro motores, uno en cada rueda; ruedas que no solo serán motrices, sino que cada una de las cuatro también será direccional.
La potencia de estos cuatro motores será superior a los 1.000 caballos, para mover 2.300 kilos de peso. El Elettrica, que así se llama de momento el prototipo presentado, será prácticamente tan rápido como el SF90, el modelo más deportivo de Ferrari, con una potencia instantánea que habrá que controlar, pues 1.000 caballos aplicados al instante sobre sus cuatro neumáticos pueden hacer que estos duren menos de 1.000 kilómetros...
La autonomía declarada por el fabricante del país transalpino para su Elettrica será de más de 500 kilómetros, no muy diferente a la de sus modelos de gasolina. Así que creo que, a nivel de sensaciones, tanto Ferrari como Porsche no nos van a decepcionar con sus automóviles eléctricos.