20 días en Mariúpol

Mariluz Ferreiro A MI BOLA

OPINIÓN

La fotografía que muestra a una embarazada siendo evacuada de Mariúpol tomada por Evgeny Maloletka.
La fotografía que muestra a una embarazada siendo evacuada de Mariúpol tomada por Evgeny Maloletka. EVGENIY MALOLETKA | EFE

14 ene 2024 . Actualizado a las 12:56 h.

Un pasillo de hospital. Camillas con pacientes maltrechos. «Me duele la pierna», se queja un chaval tumbado. «¿La que tienes o la que te falta?», le pregunta un sanitario. Es solo una píldora amarga de 20 días en Mariúpol, el documental que relata el asedio de la ciudad ucraniana por parte de las tropas rusas. Desde dentro. Desde la herida, literalmente. Un equipo de periodistas de Associated Press se queda y lo cuenta, sin darse importancia. «Vaya a su casa. No van a atacar civiles», le dicen al principio a una mujer en pánico. Tendrán que pedirle perdón más tarde, al encontrársela de nuevo en uno de los refugios improvisados, cuando todos hayan comprobado ya que nadie está a salvo. Cazas volando a cada instante, explosiones, carreras, terror a ambos lados de la cámara. Ancianos apiñados temblando. El niño que llora mientras repite: «No quiero morir». Saqueos entre vecinos cuando cortan el agua y la luz. Porque, como afirman, la guerra es como una radiografía que expone ante todos el interior del ser humano: los malos se hacen peores; los buenos, mejores. Pero lo que corta la respiración son las imágenes de los bebés. Pequeños que no sabían ni sabrán nunca qué es la OTAN ni quién es Putin. Que nunca dirán su propio nombre. Cuerpos diminutos que se agitan a golpe de desfibrilador. Tantos años de civilización para esto, para nada. «Las guerras no empiezan con explosiones, empiezan con silencio», cuenta el narrador. Veinte días. No es nada en una ciudad normal. Una eternidad en Mariúpol. Es la guerra cruda que cae sobre inocentes. En Ucrania, en Gaza, en cualquier lugar en el que ataquen a ciudadanos indefensos. El silencio (del miedo) cuando empieza. El silencio (de la muerte y la ausencia) cuando acaba.