La nueva amenaza de los opioides sintéticos: nitazenos (droga Frankestein)

Manuel Isorna Folgar PROFESOR DE LA FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN Y TRABAJO SOCIAL. EN LA UNIVERSIDADE DE VIGO

OPINIÓN

MABEL RODRÍGUEZ

05 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Los nitazenos son una clase de opioides sintéticos que incluye más de 20 compuestos, como el isotonitazeno, el protonitazeno, el metonitazeno y el etonitazeno. Estas «drogas de diseño» no están reguladas por ninguna ley específica, aunque representan un serio riesgo para la salud pública y han comenzado a aparecer ilegalmente en nuestras calles. A diferencia de opioides como el fentanilo, la morfina o la heroína, los nitazenos son una familia de sustancias que se pueden modificar molecularmente para potenciar diferentes efectos, ganándose el apodo de «droga Frankenstein». Estas drogas suelen presentarse en forma de polvos blancos similares a la cocaína, aunque también pueden ser azules, amarillos o marrones. Además, se han encontrado mezclados en pastillas junto a otros opioides como la oxicodona.

Desarrollados en la década de 1950 por la empresa química CIBA como potenciales analgésicos, los nitazenos nunca fueron aprobados para uso médico en humanos y cayeron en el olvido hasta que resurgieron en 2019 como drogas de consumo no médico. La presión sobre otras drogas, como el fentanilo, ha llevado a laboratorios ilegales a crear análogos de los nitazenos basándose en investigaciones farmacológicas históricas.

La prohibición del cultivo de opio en Afganistán por parte de los talibanes podría estar detrás del mercado negro de opioides sintéticos. Según el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT), esta prohibición se ha implementado en un 95 %-98 % de acuerdo con el análisis de imágenes por satélite.

El OEDT y Europol han destacado la urgencia de vigilar y controlar la aparición de nitazenos. En 2023, seis de los siete opioides sintéticos reportados al sistema de alerta temprana de la UE eran nitazenos, vinculados a un aumento significativo de muertes y casos de intoxicación en varios países europeos. Desde 2019, se han documentado al menos 200 muertes por sobredosis atribuidas a nitazenos en Europa y Estados Unidos, con informes preliminares de 2023 indicando un aumento en Estonia y Letonia.

El nitazeno apareció inicialmente en el 2019 en el medio oeste de EE.UU. como un polvo blanco, pero desde el 2022 la DEA ha encontrado variantes en polvo y pastillas azules, frecuentemente mezclados con heroína, fentanilo y pastillas falsas de oxicodona. Empresas chinas han sido acusadas de enviar materias primas químicas a México y EE.UU., donde son mezcladas y distribuidas clandestinamente por cárteles.

Los nitazenos presentan un grave riesgo de sobredosis, manifestado en síntomas como pupilas reducidas y la ralentización de los sistemas respiratorio y nervioso central, potencialmente letales. A menudo se requieren múltiples dosis potentes de naloxona para revertir una sobredosis, dada la extrema potencia de estos compuestos.

En conclusión, es imperativo que Europa y España se preparen para estos cambios mediante la implementación de medidas adecuadas de prevención y tratamiento, así como asegurando la disponibilidad suficiente de naloxona, un medicamento empleado para revertir sobredosis de opioides. Además, la prevención familiar juega un papel crucial, educando a los jóvenes sobre los riesgos del consumo de drogas y fomentando un entorno de apoyo afectivo y normativo. Es fundamental también reforzar la lucha contra el narcotráfico por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, persiguiendo a los traficantes y desmantelando las redes de distribución. Finalmente, los programas de prevención para reducir la demanda del consumo de drogas deben ser una prioridad, ofreciendo alternativas saludables y actividades educativas que desincentiven el uso de sustancias nocivas.