Buenas noticias para quienes confiamos siempre en la mediación como uno de los medios más adecuados para que las personas en conflicto puedan resolver controversias llegando a acuerdos en donde todas las partes ganen y no, donde una gane y la otra pierda.
La publicación de la Ley orgánica 1/2025 de 2 de enero de medidas en materia de eficiencia del servicio público de justicia, introduce en su titulo II además de la vía jurisdiccional, otros Medios Adecuados para Solucionar Controversias (MASC) en vía no jurisdiccional, como la mediación, la negociación o la conciliación. Estos métodos buscan, sobre todo, evitar la saturación de los juzgados y fomentar el diálogo entre las partes.
La idea principal detrás de estos mecanismos es lograr acuerdos que satisfagan a todos los involucrados, reduciendo los enfrentamientos y el estrés que suelen acompañar a los procesos judiciales. A través de estos métodos, las personas pueden resolver sus problemas de manera directa, con la ayuda de un mediador o de otros profesionales neutrales que les guían en la búsqueda de soluciones.
A diferencia de lo que se podría pensar, los MASC no son simplemente un trámite obligatorio que hay que cumplir antes de llegar a los tribunales. Su propósito es que las personas realmente puedan resolver sus diferencias de forma colaborativa, sin necesidad de ir a juicio, y así ahorrar tiempo, dinero y energía. Estos métodos permiten a las partes dialogar, expresar sus intereses y llegar a un acuerdo que funcione para todos. La mediación, en particular, tiene un papel destacado. En este proceso, las partes son las protagonistas y cuentan con el acompañamiento de un mediador o mediadora que les ayuda a encontrar un acuerdo. Esto no solo les permite resolver el problema concreto, sino también mejorar su relación y evitar el ambiente tenso que suele surgir en un juicio. Con esta ley, se da un paso importante hacia una justicia más humana y eficiente. Es una forma de cambiar el enfoque: entendimiento frente a la confrontación.