Vivir mejor

Ruth Nóvoa de Manuel
Ruth Nóvoa DE REOJO

OPINIÓN

Santi M. Amil

22 jun 2025 . Actualizado a las 13:22 h.

Nuestros abuelos aspiraban a que sus hijos no viviesen peor que ellos y a que los hijos de sus hijos viviesen mejor. Mucho mejor. Ahora esos nietos están en plena madurez profesional. Trabajando mucho. Se apuntan a Pilates y a cross-fit porque el deporte les ayuda a despejarse. Reservan un fin de semana en una casa rural porque el pueblo les relaja. Se anotan a un baño de árboles porque el contacto con la naturaleza les desestresa. Se arman con un botiquín de suplementos alimenticios, vitamina D incluida, porque los fluorescentes de la oficina no se parecen en nada al sol. Se compran en el súper un bebible para controlar el colesterol. Se apuntan a un club de lectura o a clases de cerámica para conocer a gente nueva porque se sienten solos en la ciudad. Y, en un momento determinado, se paran y se dan cuenta de lo relativo que es el concepto «vivir mejor».

Un grupo de profesionales han intentado desentrañar los secretos de la longevidad y la calidad de vida de los centenarios de Ourense. Esta semana presentaron algunas conclusiones. Cito al médico Roberto Fernández, que es el investigador principal de este trabajo impulsado por la Asociación Ourensividad, aunque hay mucha más gente detrás. Y les pido prestadas a los autores estas reflexiones respecto a esas personas que llegaron a los cien y llegaron bien: «No tienen recetas mágicas, pero su experiencia nos invita a repensar nuestras prioridades. Frente a la prisa, la calma. Frente al exceso, la moderación. Frente al individualismo, la comunidad. Y sobre todo, una forma de estar en el mundo que privilegia la gratitud, la fe, el trabajo constante y la alegría por las pequeñas cosas».

Calma, moderación, comunidad. Vivir mejor. Apunten.