Tecnología suiza para Altri

Uxio Labarta
Uxío Labarta CODEX FLORIAE

OPINIÓN

MSD

18 jul 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El proyecto de Altri con Impulsa, y luego con Greenalia, para establecerse en la Ulloa gallega presentaba déficits tecnológicos para la fabricación de fibras vegetales a partir del eucalipto, tipo lyocel. La tecnología de Lenzing AG en fabricación de celulosa soluble y de ahí en lyocell, u otras de sus marcas de fibras vegetales para el textil, luego de su compra por la brasileña Suzano, no la hacía accesible para el proyecto de Altri, como se evidenció en La Voz de Galicia.

Ahora, Altri ha dado un salto cualitativo en la resolución de sus déficits de tecnología al aliarse con HeiQ AG. Una start-up e incubadora tecnológica de empresas surgida de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich (ETH Zúrich) con su división de Materiales y de Ciencias de la Vida, que ha logrado desarrollar la tecnología para la fabricación de un hilo celulósico de fibra textil, AeoniQTM, empresa cotizada en la Bolsa de Londres y desde hace unos meses de nuevo con estatus de empresa privada. En este enredo conviene diferenciar entre el lyocell y AeoniQTM, pues el primero es un tipo de fibra, y el segundo una marca registrada, que incluso puede utilizar fibras tipo lyocell. Fibras para usos textiles con características de sostenibilidad y en respuesta a los graves problemas de residuos de la industria textil, derivados del poliéster y el nylon utilizado.

De este acuerdo ha dado cuenta hace días la empresa, como recoge La Voz, al anunciar la constitución de AeoniQTM, sociedad conjunta entre Altri Group y HeiQ Materials, con participación mayoritaria de Altri y donde HeiQ será el socio tecnológico. The Lycra Company adquirió los derechos exclusivos de distribución del producto marca AeoniQTM.

Esta decisión estratégica de Altri pasando de la pasta de papel y la pasta soluble a un escalado tecnológico para desarrollar una industria de fibras textiles sostenibles y totalmente biodegradables, con independencia de los problemas ecológicos y ambientales propios de la industria forestal de base y de aquellos asociados a la producción de fibras, supone una clarificación y diversificación en las estrategias de Altri. En primer lugar, con la transformación tecnológica de su factoría en Caima, Constância, en el Tejo portugués —hasta ahora dedicada a pasta de celulosa soluble, para su transformación en fibras textiles fuera de Europa—, en una planta industrial para AeoniQTM con capacidad para 1.750 toneladas e inversión de 90 millones. Y también en la diversificación de sus objetivos industriales, más allá de la producción de papel y celulosa, segmentos en dificultad por la competencia americana, para adentrarse en el mundo del textil y de su imprescindible reciclado. Este déficit tecnológico propio de Altri era una de las debilidades, además de su ubicación, del proyecto seleccionado por Impulsa, una sociedad público-privada de Galicia, en un acuerdo que todavía se mantiene velado a los gallegos.