¿Insomnio o depresión durante el otoño?

Carmen Reija
Carmen reija FARMACÉUTICA Y DIVULGADORA SANITARIA

OPINIÓN

Oscar Vázquez

02 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

En otoño se presentan varios factores que generan la sensación de tener poca energía. A nivel nutricional estaría indicado incluir en todas las comidas diarias alimentos proteicos, pudiendo elegir entre carne, pescado o marisco para aprovechar su potencial.

También debería limitarse el consumo de azúcar, evitando endulzar las comidas y bebidas o utilizando un sustituto saludable como la miel.

Finalmente, resultaría también adecuado reducir el consumo de cafeína, sustituyendo el café por un té verde o un chocolate caliente.

Para desayunar elija copos de avena, que contienen avenina, un alcaloide de efecto relajante. Añádalos por ejemplo a un batido de frutas, un vaso de leche o un yogur.

A media mañana puede disfrutar de un té verde y de un puñado de frutos secos, ricos en ácidos grasos omega 3 y 6, fibra, vitaminas y minerales. Mastique lentamente almendras, nueces, pistachos o anacardos.

La comida puede consistir en una ración de pasta (mejor las variedades integrales) con hidratos de carbono de absorción lenta que evitan variaciones bruscas de los niveles de glucosa en sangre, combinada con carnes magras (pollo, pavo, conejo), pues contienen tirosina y vitamina B12, compuestos asociados a la reducción del insomnio y la depresión. O un plato de legumbres, que aportan proteínas de origen vegetal, aunque poca cantidad de metionina, cisteína o triptófano. Elija lentejas, garbanzos o soja y prepárelos con vegetales y arroz.

Meriende unas onzas de chocolate negro en sus múltiples variedades y un plátano, considerado remineralizarte, antioxidante, nutritivo y suavemente laxante.

Para cenar resultaría adecuado el pescado azul, pues aporta ácidos grasos omega 3 y 6. Elija sardinas o salmón y prepárelos al horno con verduras.

Otra opción sería elaborar una ensalada con aguacate y atún aliñados con aceite de oliva virgen y limón.