Los directores independientes luchan contra la presión del prototipo americano

REDACCIÓN OURENSE

OURENSE

PILI PROL

Bruce Spangler y Erik de Bruyn explicaron sus problemas de financiación y distribución en el certamen ourensano

07 nov 2001 . Actualizado a las 06:00 h.

Desarrollar un proyecto de cine independiente es una ardua tarea en la que se reproducen las trabas y problemas, sea cual sea el país de origen. Así ha quedado de manifiesto a lo largo de todo el Festival Internacional de Cine Independiente de Ourense. El festival contó ayer con la presencia de dos directores: Bruce Spangler (el canadiense que presenta a concurso Protection) y Erik de Bruyn (holandés, que compite por el premio Calpurnia con Wild Mussels). La globalización de las producciones -Spangler y De Bruyn coincidieron al señalar que las políticas audiovisuales de Holanda y Canadá tratan de marginar la producción independiente para conseguir películas comerciales en la línea del cine americano- o las dificultades para entrar en un circuito de exhibición fueron algunos de los puntos que centraron su comparecencia. Memoria histórica El Festival Internacional de Cine Independiente de Ourense contó también ayer con la presencia del director Xan Leira, autor del documental Castelao e os irmáns da liberdade. Leira, Avelino Pousa Antelo -Presidente de la Fundación Castelao-, Xosé Luis Bóveda -hijo de Alexandre Bóveda- y Xosé Manuel Cid, en representación de la Universidade de Vigo, presentaron este proyecto que se enmarca, en palabras de su director, en el objetivo «de recuperar a nosa memoria histórica ó traverso do home paradigmático do século XX en Galicia». Reparto de lujo Por su parte José María Caro, director del corto El apagón, explicó su experiencia con una obra en la que participaron desinteresadamente actores de la talla de Carmen Maura, Pepe Sancho, Emilio Gutiérrez Caba o Tito Valverde, entre otros.