El Museo Reina Sofía se interesa por la obra de Arturo Baltar

x. m. r. OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Agostiño Iglesias

El centro mostró en su día el «Acariño galaico» de Val del Omar

30 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los caminos de José Val del Omar y Arturo Baltar se cruzaron a comienzos de los años sesenta del pasado siglo. Fotógrafo, director de cine e inventor Val del Omar (Granada, 1904 - Madrid, 1982) no tuvo en vida la consideración que merecían sus obras y sus inventos audiovisuales. Sí que empezó a ser valorado años después, siendo reivindicada su figura y su obra. El realizador y Arturo Baltar coincidieron en un proyecto emblemático y maldito -Val del Omar no llegó a tener la pieza montada y este trabajo se realizó mucho tiempo después de su desaparición- que fue Acariño galaico. El escultor ourensano y su lucha con el barro para crear arte y dar vida a la tierra eran los protagonistas del trabajo del director granadino. En una de las escasas fotografías que se conservan de aquel rodaje, de Enric Massó, aparecen Xaquín Lorenzo, José Val del Omar, Virxilio, Conde Corbal y Arturo Baltar. 

El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía ha desarrollado en los últimos años varias iniciativas vinculadas con el director granadino y cuenta con obra suya entre sus fondos. También presentó en su día el laboratorio del propio Val del Omar -él lo denominaba P.L.A.T.: Picto-Lumínica-Audio-Táctil- y se pudo conocer el funcionamiento de la Truca, el invento en el que combinaba proyectores, láser, reproductores y otros artilugios «para crear revolucionarios efectos en sus grabaciones». Ahora, el Museo Reina Sofía se ha interesado por la obra de Arturo Baltar, el protagonista de Acariño galaico, y una delegación de dicho centro se desplazó a Ourense para conocer el trabajo del desaparecido escultor ourensano.

Con la jefa del Área de Colecciones del Reina Sofía, Rosario Peiró, a la cabeza una delegación del espacio museístico madrileño se desplazó a Ourense para conocer la obra de Arturo Baltar. La primera parada fue en el Museo Municipal de la calle Lepanto para ver el trabajo de sus primeros años, ya que el artista cuenta con obra en los fondos del centro de arte municipal.

Tras el paso por el MMO la comitiva se desplazó a las instalaciones del Museo Arturo Baltar, en la plaza de San Cosme. El conjunto del belén, que ocupa la capilla de San Cosme, los retablos y las escenas creadas por las manos del escultor ourensano centraron el recorrido del equipo del Reina Sofía.

La obra del artista, fallecido en diciembre del 2017, podría tener presencia en el centro de arte madrileño en un futuro próximo. Acariño galaico, pieza rodada en 1961 y sobre la que se trabajó en 1981-82 y 1995 para crear un montaje de la misma, sigue siendo un proyecto abierto en el que trabajan los investigadores.

De la presencia de Baltar en la obra de Val del Omar o de su paso por el Reina Sofía se recogen testimonios en el libro póstumo sobre el escultor del que es autora Marifé Santiago Bolaños.