Los comercios de Concordia recelan de las obras de las rampas mecánicas: «Nos van a perjudicar»

Miguel Ascón Belver
Miguel Ascón OURENSE / LA VOZ

OURENSE

La zona de carga y descarga al inicio de la calle ya está inhabilitada, lo que genera molestias.
La zona de carga y descarga al inicio de la calle ya está inhabilitada, lo que genera molestias. Santi M. Amil

Los negocios de la calle ourensana creen que el resultado no atraerá a más clientela

24 nov 2022 . Actualizado a las 11:20 h.

Las obras de la calle Concordia empezaron este lunes y los vecinos y comerciantes de la zona echan en falta conocer los detalles del proyecto. Saben que se prevé la instalación de siete rampas mecánicas, pero no cómo afectará la ejecución de las obras a su día a día.

«Información, cero patatero. A los comerciantes no nos han informado absolutamente de nada. Vamos, yo me enteré este martes, porque vi una foto, de que las rampas iban por el otro lado. Con esto te lo digo todo», explica Laura Crespo tras el mostrador de la tienda de ropa infantil Sergent Major, que está en el primer tramo de Concordia, precisamente donde empezarán a ejecutarse las obras.

Las consecuencias en ese entorno se notan ya con el vallado de la zona y el traslado del espacio de carga y descarga que había al inicio de la calle, junto al cruce con Progreso. Ahora los transportistas tienen que llevar a pie la mercancía desde más lejos. «Yo lo he visto esta mañana con los palés de las bebidas, con lo que pesan. Tuvieron que aparcar en el Paseo y casi ni podían con ellos», relata Mabel Martínez, responsable de la tienda de ropa Curra.

Mabel Martínez, de la tienda Curra.
Mabel Martínez, de la tienda Curra. Santi M. Amil

Ese es un problema al que también se refiere Silvia Nogueiras, de la librería Nobel: «Os transportistas xa teñen que deixar a mercancía arriba de todo, xa nola serven máis tarde». Según dice, la situación empeorará cuando comiencen los trabajos de la maquinaria. «Cando haxa ruído, po e obras... Creo que non estamos moi contentos en xeral na rúa», resume Nogueiras, que se hace eco de una preocupación generalizada en la calle.

Laura Crespo, de Sergent Major, está convencida de que las ventas bajarán en cuanto realmente empiece el movimiento de obreros. «A nosotros esto nos va a perjudicar, evidentemente. Por una calle que está llena de polvo y de ruido no pasas, la evitas», reflexiona la comerciante, que tampoco cree que la situación vaya a ser mejor cuando terminen las obras. «No creo que vaya a incrementar las ventas en un futuro. Quedará muy bonito para la foto de los cuatro turistas que vienen, pero para el día a día da igual», dice Crespo, que también se pregunta cuánto costará el mantenimiento de las rampas mecánicas cuando estén en funcionamiento.

Silvia Nogueiras, de la librería Nobel.
Silvia Nogueiras, de la librería Nobel. Santi M. Amil

La decisión de restringir el tráfico en la calle Concordia ya había generado recelos entre los comerciantes hace dos años y la instalación ahora de esos pasillos automáticos tampoco convence. «No estoy de acuerdo porque esta rampa realmente no vale para nada. ¿Tú crees que una persona mayor se puede subir a la rampa o bajar? No, se va a caer», razona Mabel Martínez, que recuerda que la mayor parte de los recursos termales de la ciudad siguen cerrados, por lo que cuestiona las prioridades de gasto del gobierno local. «Que esté todo eso así, que es lo que trae a Ourense turismo, y que vengan aquí a gastar cuatro millones de euros en una rampa me parece innecesario».

Martínez cree que la calle ya sufrió un golpe importante con la restricción del tráfico aplicada hace dos años para que solo puedan circular por allí los vehículos de carga y descarga y los que se dirigen a garajes o párkings. «Esta calle ya al ser peatonal, bajó a la mitad. La gente antes venía de fuera, aparcaba un momento y bajaba», lamenta la responsable de Curra. Otros comerciantes, como Laura Crespo, creen que el impacto de esa medida quedó amortiguado por la falta de control de la misma: «Porque aquí entran y salen los coches como les da la gana. La calle hacía hasta ahora exactamente el mismo servicio que antes».

Un «capricho», según el PSOE

El portavoz del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, habló sobre este asunto en una rueda de prensa y, en respuesta a las preguntas de los periodistas, dijo que la instalación de rampas en Concordia era un «capricho» del alcalde sin justificación objetiva. Alertó además de posibles problemas de mantenimiento y criticó la falta de información a la ciudadanía sobre el proyecto.

A licitación la pavimentación en piedra de las calles del entorno de San Lázaro

La humanización de la calle Concordia se une a las obras que, también en el centro de la ciudad, se están desarrollando para la renovación del firme y la reparación de las aceras en varias calles. Además, próximamente se pondrán en marcha otros dos proyectos en la zona y uno de ellos tiene previsto un trámite fundamental este mismo jueves. Se trata de la pavimentación en piedra de las calles del entorno del parque de San Lázaro.

Según lo previsto en el orden del día de la Junta de Gobierno Local que se celebrará hoy, las obras se licitarán por 1.198.543,53 euros y afectarán a la Rúa San Lázaro, Xoaquín Lorenzo Xocas, Bedoya (hasta Valle Inclán) y Cardenal Quevedo (hasta la avenida de La Habana). Además de renovar el pavimento, se prevé también la mejora de los servicios en esos viales.

Novedades con las termas

Otro de los acuerdos previstos en la reunión de la Junta de Gobierno Local de este jueves es la licitación del servicio de atención, control y prestación de primeros auxilios en las termas que el Concello de Ourense tiene ya en funcionamiento en Outariz y Burga de Canedo. Actualmente ese trabajo está siendo realizado por los operarios de una empresa contratada por la vía de urgencia por el gobierno local, que decidió hacerlo de ese modo para agilizar la reapertura de esas pozas el pasado mes de febrero.

Con el procedimiento abierto que se prevé aprobar hoy, ese servicio —exigido por la ley autonómica de aprovechamiento lúdico de los espacios termales— se licitará por lo que queda de este año y el próximo por 228.327 euros (IVA incluido).