El básquet es una forma de vida para los Vázquez: Sony fue profesional e Isaac le sigue e inicia su andadura en el profesionalismo
22 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La afición al baloncesto de Isaac Vázquez Pérez (19 años) surgió de forma natural. No fue nada forzado, explica su padre, Sony Vázquez (Ourense, 1975), toda una institución del baloncesto ourensano con trece temporadas como profesional, con cuatro etapas en el Club Ourense Baloncesto, además de experiencias en León, Gijón y Portugal. Como escolta jugó desde la ACB a la LEB Plata, además de la liga portuguesa. Ahora es Isaac el que después de quince años en Salesianos —con dos últimas temporadas brillantes en la Liga EBA con el Solgaleo Bosco— el que quiere iniciar su carrera profesional. «Quiero ser jugador de baloncesto, si puede ser en la ACB mejor que en LEB Oro y si no, en Plata, en el mayor nivel que pueda», dice con convicción el joven base.
De pequeño correteaba por el Pazo Paco Paz de la mano de su madre, mientras esperaban que Sony terminase de entrenar o de jugar. El balón de baloncesto fue un elemento que nunca fue extraño. Sony Vázquez insiste en que no lo indujo a jugar: «No fue por presión, lo quiso él», si bien el hijo cree que si su padre no hubiese sido baloncestista su camino hubiese sido diferente. «Influyó bastante. Si mi padre no hubiese sido jugador, yo no jugaría, eso sin ninguna duda», matiza. Le regalaron a Sony, para su hijo, una canasta de juguete de Bart Simpson para colgar en la puerta. Esa canasta fue subiendo centímetros a medida que crecía el niño y su afición por el básquet. Sony concede que, en su casa, el baloncesto es una forma de vida y estuvo siempre presente. «Desde el principio fue mi pasión, con cinco, diez, quince o 19 años», corrobora Isaac. Una vez fue a probar si le gustaba el fútbol. Le salió bien el entrenamiento, pero no quiso volver. Ya entonces tenía claro que su deporte tenía que ser el baloncesto. Sony, en cambio, practicó varias disciplinas antes de decantarse por el de la canasta. Hizo fútbol, taekuondo o natación «En baloncesto empecé tarde, con 11 o 12 años, con Nino Santos que en paz descanse, y ya fue un enganche», admite el exjugador.
Al terminar su carrera como jugador, Sony Vázquez se enroló en Salesianos como coordinador y director deportivo de la sección de baloncesto, una de las más potentes del colegio, centro pionero en Ourense en la introducción de este deporte. Son 130 niños y niñas los que se forman en esta cantera. Isaac empezó con cuatro años, jugando con niños dos años mayores. «Hasta este año, nuestras agendas eran muy parecidas», afirma Sony.
Isaac fue pasando por las distintas categorías y aprendiendo con diferentes entrenadores. Hasta el año pasado, con 18 de edad, no decidió que quería ser jugador profesional. Realizó una buena temporada con el equipo, en la que superó sus propias expectativas personales, y vio que quería que esa fuera su forma de vida. Dedicó el verano a trabajar «más en serio». El cambio físico que experimentó fue notable en los dos últimos años. Esta temporada en la Liga EBA fue incluso mejor con la anterior, porque los resultados del equipo fueron mejores y los suyos propios también. El base ourensano ha sido cuatro veces MVP de su grupo y el equipo consiguió la permanencia con mayor holgura. Es ahora cuando está decidido a «meter la cabeza en el profesionalismo». En las últimas semanas ya ha tenido la oportunidad de entrenar por las mañanas con un equipo profesional como el COB, gracias al convenio de colaboración entre AD Bosco Salesianos y Club Ourense Baloncesto. Este verano le espera más trabajo físico: «Toca coger kilos», dice.
En esta nueva etapa, Sony Vázquez está al lado, para apoyar y dar algún consejo. «Hay que elegir un buen proyecto. Hay que hacerse un nombre porque hay muchos como él. Es conocido en Ourense y en Galicia y suena a nivel nacional. Es él quien va a elegir. El entorno le ayuda y conoce el mundo del baloncesto, en el que no es oro todo lo que reluce. Habrá años duros y tienes que seguir», advierte el padre. En su caso, no obstante, reconoce que en su carrera profesional hubo «más luces que sombras» y lo bueno superó «infinitamente» a lo malo. Entre lo positivo, están las relaciones de amistad, como la casi familiar que entabló con el también ex cobista Juanjo Bernabé, que será el representante de Isaac. «Donde decida mandarlo será un buen sitio para Isaac», confía Sony.
Quiénes son
El padre. José Antonio, Sony, Vázquez Vázquez (Ourense, 1975) jugó trece temporadas como profesional en cuatro etapas distintas en el COB, desde la ACB a la LEB Plata. Fue su capitán. Escolta, buen tirador y gran defensor.
El hijo. Isaac Vázquez Pérez (Ourense, 2004) es base. Ha jugado en el Solgaleo Bosco Salesianos de la Liga EBA las dos últimas temporadas. Quiere ser jugador profesional.
Sony: «El baloncesto me lo dio todo. A mi hijo le digo que disfrute»
Para Sony Vázquez, ver la progresión de su hijo supone una doble satisfacción, como padre y como responsable de la cantera del club, porque formar baloncestistas es uno de los objetivos. El antiguo capitán del COB asegura que es muy fácil trabajar en Salesianos, donde tienen instalaciones disponibles los 365 días del año. En su caso está feliz de dedicarse a lo que le gusta y de seguir vinculado a este deporte tras retirarse como jugador. «El baloncesto me lo dio todo: amigos, experiencias, viajar. A Isaac le digo que disfrute». El joven ya conoce los sinsabores del deporte, pues pasó por una dura lesión que le tuvo apartado ocho meses de la cancha. Cree que eso le hizo madurar y «valorar las pequeñas cosas».
El «pequeño» de los Vázquez (mide 1,92 metros) estudió ESO y Bachillerato en Salesianos y tras la ABAU se enroló en el ciclo de Técnico Superior de Acondicionamiento Físico. Desde su etapa sénior casi siempre ha jugado de base, aunque puede alternar con otras posiciones exteriores. De los bases que le gustan, destaca sobre todo el Chacho Rodríguez, pero también menciona a Luka Doncic —con quien tiene una foto del 2015— o Stephen Curry, de la NBA. También entrena a un equipo de alevines.