Juan Manuel Suárez, propietario de Nattex e «influencer» sobre descanso: «La gente me manda fotos de cómo duerme para saber si es buena postura»

Juan Manuel Suárez Feijóo (Ourense, 1968) lleva vendiendo colchones desde que la siesta era sagrada. Son tres décadas en un negocio que empezó siendo familiar, pero que acabó por forjarse un lugar en el mundo del descanso bajo el nombre comercial de Nattex —un guiño a «natural» y «látex»—. Lo que no esperaba este curtido empresario es que su segunda juventud en las ventas llegaría en formato de vídeo vertical. En la actualidad, Juan es un referente en TikTok e Instagram como influencer especializado en colchones, descanso y más. «El tema de las redes sociales, primero, es barato, porque no cuesta nada, y segundo, tiene un alcance brutal», reflexiona. Pero sus andanzas se remontan a mucho antes de que existiesen Internet o las redes sociales. Juan Manuel Suárez es la tercera generación de una familia dedicada al sector mobiliario. Fue su padre el que fundó Mudea (Asociación Mobiliaria de Galicia), dedicada a la compra y venta de muebles. Pero con el paso de los años, Suárez se dio cuenta de que esa manera de hacer negocios no era lo suyo. «Yo de aquellas quería crecer, era joven. Parecía que todo era accesible y no coincidíamos. Yo me desesperaba, tenían negocios muy consolidados», explica.

El giro en el mercado —tras comprar la parte correspondiente de la empresa a sus familiares— llegó al notar que el mueble de estilo gallego no se vendía en otras partes de España. «Los planteamientos que había aquí en Galicia en Valladolid no suponían nada. Las librerías de castaño aquí las vendíamos por camiones y en Valladolid no sabían lo que era y nadie las quería. Llegabas a Madrid y ya no querían librería: querían muebles modulares», recuerda. Pero con ese hambre de expansión, Suárez encontró un nexo universal en todo el país: el descanso. «Los colchones eran los mismos los que se vendían en Ourense, en A Coruña o en Madrid. Entonces dijimos que teníamos que hacer un grupo especializado en descanso», matiza. Fue así como nació Nattex, que llegó para expandirse por toda Galicia. Empezaron a contactar con proveedores y firmaron contratos de importantes cantidades, siendo, tanto Juan como sus socios, jóvenes con ganas de más y a quienes no tomaban demasiado en serio. «Fue entonces cuando empezamos a crecer, pero despacio. En aquel momento había muchos grupos», comenta.

Objetivo, la expansión

Tras conseguir nuevos contratos y aumentar su red de contactos, finalmente Juan Manuel Suárez consiguió cruzar fronteras y expandir su negocio por todo el país: «Pasamos de 30 tiendas asociadas a 128 tiendas en toda España».

Tras años de crecimiento, la idea de negocio de Juan empezó a inclinarse hacia la apuesta por la marca propia para así no depender de las condiciones de los fabricantes de colchones, negocio por el que apostó y con el que sigue al frente.

El éxito de Juan en redes sociales es un misterio que él mismo no se explica. «Imprimimos el guion, me graba una compañera, con la misma ropa con la que vengo a trabajar, y ya está», cuenta. Logra mucha interacción: «La gente me manda fotos de cómo duerme para que le diga si es una buena postura o no».

«Una chica de Texas me pidió que le recomendara un colchón»

La apuesta de Juan por reforzar su marca en el sector del descanso dio un paso más allá. Hacía tiempo que rondaba por su cabeza la idea de expandir su negocio en plataformas digitales, consiguiendo cientos de miles de seguidores en Instagram y TikTok. Sus perfiles funcionan como altavoz de Nattex. Cada día decenas de personas contactan con él para preguntarle por sus productos y para que les recomiende en función de sus necesidades: «Hasta una chica de Texas me pidió que le recomendara un colchón».

«Imprimimos el guion, me graba una compañera, con la misma ropa con la que vengo a trabajar, y ya está», cuenta. Gracias a su éxito en plataformas, gente de diferentes lugares acude a Juan para comprar productos para su descanso, dejándose recomendar por esa persona que ven en vídeos y les resulta familiar. «Viene gente que me sigue y notas que se dan cuenta de que soy el de los vídeos, es un papel que hay que jugar. Está pensado para vender. Y al final te ayuda porque te haces conocido y te tienes que adaptar al nuevo rol», concluye.

El ourensano no deja de aprender. «Siempre digo a mis clientes que para mí que hay dos pilares fundamentales. La base es tener un buen descanso. Después están la alimentación y el deporte», concluye.

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