Depositados en Gijón los restos de un joven fusilado en 1939 en Galicia

La Voz

CELANOVA

Acto de depósito de lo restos de Baldomero Vigil-Escalera en un cementerio de Gijón
Acto de depósito de lo restos de Baldomero Vigil-Escalera en un cementerio de Gijón Juan González | EFE

Baldomero Vigil-Escalera, que tenía 19 años, es uno de los asturianos enterrados en la fosa común de Celanova, que tiene activa la búsqueda de familiares de otros cuatro exhumados

24 feb 2025 . Actualizado a las 17:03 h.

Los restos de Baldomero Vigil-Escalera, un joven de 19 años fusilado en Celanova (Ourense) en 1939 tras ser capturado por tropas franquistas y enterrado en una fosa común, han sido depositados este lunes en un cementerio de Gijón en una ceremonia a la que han asistido familiares y autoridades políticas de Galicia y Asturias.

Los restos de Baldomero fueron exhumados en 2023 junto a otros seis asturianos y un salmantino de una fosa común en Celanova, y entregados a sus familiares que los depositaron hoy en un nicho del Cementerio de Deva, en las afueras de Gijón, acompañados por la viceconsejera de Derechos Ciudadanos del Principado de Asturias, Beatriz González Prieto, el alcalde de Celanova, Antonio Puga Rodríguez, concejales de Gijón y representantes de la Universidad de Santiago de Compostela.

En una intervención antes de que fuera depositada la urna, la viceconsejera ha destacado el compromiso del Gobierno de Asturias con «la verdad, la memoria y la justicia» y ha hecho un llamamiento a «todos los demócratas de Europa a hacer un esfuerzo para parar el fascismo».

El alcalde de Celanova ha dicho que la restitución de los restos del joven gijonés ha sido posible por el «compromiso con los principios de dignidad y democracia» de una ciudad «solidaria», que apoyó los trabajos de exhumación de una fosa conocida como «la de los asturianos».

En 1939 Baldomero Vigil-Escalera, de 19 años, estaba hospitalizado en Gijón y con un grupo de compañeros intentó huir en un barco que fue capturado por tropas de la armada franquista y trasladado a un campo de concentración en Ribadeo donde fue sentenciado a muerte.

El mismo día en el que fue trasladado a la cárcel, en enero de 1939, fue fusilado junto a otros seis asturianos y a un salmantino que residía en Oviedo, que fueron enterrados en una fosa común exhumada en diciembre de 2022 por la Comisión de Memoria de Celanova.

En junio de 2023 se entregaron a sus familiares los restos de Abelardo Suárez, de 28 años, natural de Gijón, y de Marcelino Fernández, de Mieres, que fueron los primeros identificados, y en 2024 los de Baldomero.

Actualmente se busca a los familiares de otros cuatro exhumados, Guillermo de Diego Álvarez, de 25 años, de Mieres; Belarmino Álvarez García, de 29 años, de Sama de Langreo, Alfonso Moreno Gayol, de 27 años, de Salamanca, y Mariano Blanco González, de 36 años, de Gijón, informa Efe.