La Guardia Civil investiga varios actos de vandalismo contra vehículos en Celanova: «O peor é a sensación de inseguridade»
CELANOVA
Los vecinos ya han denunciado más de una decena de ataques a su propiedad
17 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.A principios del mes de abril un vecino de Celanova, Elvis Silva, denunció que desconocidos vertieron disolvente de pintura en los cuatro lados de su coche, señalando que desde hacía tiempo varios vehículos aparcados en el barrio de la Rúanova de Celanova, habían sufrido diversos daños como rayazos o pinchazos de neumáticos. Desde entonces, han sido numerosas las personas que se ha puesto en contacto con él por hechos similares. «A xente nos segue a parar pola rúa e contarnos que se intentaron entrar naquela casa, que se nesta rúa causaron danos en propiedades privadas ou en mobiliario urbano. O problema está aí», señala. Añade que en solo una semana le llegaron noticias de otros nueve coches atacados en el barrio.
En su caso, explica que todo ocurrió en pleno día: «Aparquei moi cedo nunha rúa onde adoitamos a deixar os coches para compartir vehículo para chegar ao traballo». Aunque en un primer momento creyó que era un caso personal, debido a alguna rencilla, subraya que enseguida se dio cuenta de que no es así y se trata de un problema más grande. En las horas siguientes de denunciarlo en las redes sociales recibió, además de apoyos, los primeros comentarios de que su caso era uno más. «A fin de semana, varias persoas paráronme para dicirme que sabían doutros actos similares na mesma zona ou en lugares próximos como a estrada de Mourillós ou na rúa Miguel Ángel Blanco. O domingo de madrugada, dos turismos aparecieron con rodas pinchadas nunha urbanización do barrio», comenta, Recuerda que la Policía Local de Celanova cuenta con cuatro efectivos que trabajan de lunes a viernes, pero sin llegar a cubrir las 24 horas. «Los fines de semana, nada», critica.
La Guardia Civil ya se ha puesto en contacto con Elvis Silva para solicitarle información y datos no solo sobre su caso, sino también sobre el resto. Cuatro de ellos incluían rayazos en los vehículos; otros cuatro, ruedas pinchadas; uno, restos de basura sobre la carrocería y otro, ataque con líquido disolvente.
«O problema é real. O peor é a sensación de inseguridade e de impunidade coa que parece que poden actuar ou vándalo ou vándalos. Até o momento ninguén falou de aumentar a vixilancia ou instalar cámaras. Nada. Silencio. E resulta que a xente nos segue a parar pola rúa e contarnos que se intentaron entrar naquela casa, que se nesta rúa causaron danos en propiedades privadas ou en mobiliario urbano. O problema está aí», denuncia.