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Iniciativa navideña en Dacón para ayudar a la familia a la que le ardió la casa
25 dic 2020 . Actualizado a las 16:27 h.Tres días antes de Nochebuena, Soraya Gómez y su familia se quedaban sin su casa en la aldea de Dacón, en Maside, por culpa de un incendio que la devoró en pocas horas. Esta Navidad está siendo la más dura de sus vidas. Tanto ella y sus hijos, como su hermana y los suyos, y también su madre, María, una anciana cuyos padres ya criaron en esa vivienda, están pasando las fechas navideñas durmiendo en caravanas. «Está siendo horrible porque no tenemos espacio ni pertenencias. Necesitamos alquilar algo mientras duren las obras de reconstrucción de nuestra casa», dice Soraya. «Todos mis recuerdos estaban allí y ahora son solo cenizas», añade, entre lágrimas, María. La familia participa todos los años en el Belén viviente de Dacón. Los pequeños Edgar y Alma hicieron de niño Jesús cuando todavía eran recién nacidos, Sofía y Nerea han hecho de ángeles, Manuel de paje, Giovanni de pastor y la propia Soraya de Virgen María.
Ya que el covid-19 obligó a cancelar la tradición de esta pequeña aldea de Maside, a la asociación de vecinos se le ocurrió organizar un encuentro con los Reyes Magos, donde además de recibir las cartas de los niños y entregarles caramelos, también han recogido donativos para la familia. «Llevan toda la vida colaborando con el Belén, los conocemos mucho y queríamos apoyarles lo máximo posible en estos momentos tan difíciles», explica Olalla Crespo, una de las organizadoras de la iniciativa. La solidaridad no se hizo esperar el día de Navidad y el espacio habilitado para depositar los donativos estaba a rebosar de bolsas con mantas, ropa, comida y demás utensilios. «Fue una sorpresa que no nos esperábamos y no podemos sentirnos más agradecidos. Muchos vecinos nos están ayudando y también gente que viene de distintos puntos de Galicia», afirma Soraya. Desde Ourense, Boborás, Ribadavia o A Cañiza, muchos son los que este viernes quisieron solidarizarse con esta familia de Dacón y acercarles algo con lo que poder ayudarles a sobrellevarla.

Por otro lado, la visita de los Reyes Magos a Dacón el día de Navidad no pasó desapercibida para los niños de la zona. Para Iker, de 7 años, fue una sorpresa. «Venía a dejar unos juguetes para los niños a los que se le quemó la casa esta semana y me encontré con esto», decía ilusionado y con las manos a rebosar de caramelos. El rey Melchor fue el encargado de desinfectarlas antes de ponerle los dulces encima: «Aquí mantemos sempre a seguridade frente ao covid-19».