Funcionarios donan 2 toneladas de comida en señal de protesta

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Los empleados públicos luchan contra los recortes recogiendo alimentos

06 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La lucha contra la crisis se articula intentando que los más vulnerables se olviden de ella. Después de meses concentrándose contra los recortes aplicados por el Gobierno de Mariano Rajoy, los funcionarios del edificio administrativo de la Xunta han dado un giro solidario a sus protestas recogiendo casi dos toneladas de alimentos para los colectivos más desfavorecidos que atiende a Cáritas y Aldeas Infantiles. «Non nos van a recortar a nosa capacidade de compromiso en defensa duns servizos públicos de calidade e dunha sociedade máis xusta», recoge el manifiesto de los empleados públicos, que han dado este giro para ayudar a los pontevedreses que «sofren a cara máis dura desta crise económica, social e política».

Solo hicieron falta cinco horas para que la entrada del edificio se llenase de bolsas de alimentos que donaron los cerca de 700 funcionarios de la Xunta. La tradicional protesta de los jueves se adelantó un día al ser hoy festivo. A la parada habitual de media hora para la concentración con café, los profesionales han optado por organizar una recogida de alimentos para los más necesitados.

La entrega de casi dos toneladas de alimentos incluye 300 paquetes de leche o 155 botellas de aceite, entre otros productos, que se repartirán entre Cáritas y Aldeas Infantiles. La ayuda ha superado todas las expectativas iniciales, según explicaba ayer la responsable comarcal de CIG-autonómica, María Isabel Martínez, que a primera hora de la tarde concluía el recuento de la ayuda y esperaba a que llegase una furgoneta de la papelería Carlin para trasladar la comida. La protesta solidaria ha encontrado apoyos en la ciudad. Ante el llamamiento a la colaboración para poder repartir el material recogido, Carlin se ha puesto en contacto con ellos para colaborar. Cerca del 60 % de los alimentos donados se destinan a Cáritas Interparroquial -que atiende a 50 familias de la ciudad- para que los distribuya, mientras que Aldeas Infantiles vendrá el lunes a recoger los alimentos. «Cada vez temos menos dereitos non só como traballadores senón tamén como cidadáns, e cada vez son máis os traballadores e traballadoras que son expulsados pola porta de atrás non só do mercado laboral», señala Martínez, que reconocía que hubo hasta ciudadanos anónimos que acudieron a la Xunta para dejar su aportación a una crisis que obligó a 2.796 personas a recurrir a las ayudas sociales del Concello en los tres primeros trimestre del año.

En solo cinco horas, los funcionarios recogieron dos toneladas de comida